El músico ha asumido todo tipo de retos deportivos, desde la subida al Aconcagua a recorrer más de una docena de veces el Camino de Santiago.
El músico ciego Serafín Zubiri, un hombre que ha asumido todo tipo de retos deportivos, desde la subida al Aconcagua a recorrer más de una docena de veces el Camino de Santiago, se declara un enamorado de la histórica ruta de peregrinaje, que "tiene un veneno especial".
En el "FairWay", el primer foro integral sobre este sendero, que se está celebrando en Compostela, meta del caminante, este cantante navarro ha impartido hoy la ponencia "El límite, nosotros mismos" y ha comentado que el Camino supone "un antes y un después", así como que en él afloran las emociones, positivas y negativas, lo que es la personalidad de cada uno.
Es ésta, al menos tal y como él la ha vivido, una experiencia muy "introspectiva" que recomienda "a todo el mundo" y, a aquellos que no tengan demasiado tiempo, les aconseja la parte de Galicia, una tierra que a él lo ha "marcado muchísimo"; no en vano residió en Pontevedra entre los 6 y los 15 años, cuando el carácter se está definiendo.
"Yo siento ese cosquilleo" por Galicia, ha remarcado, y, a modo de receta, ha pedido que se elija la segunda quincena de septiembre o el mes de octubre para caminar por esta ruta.
Después de esta recomendación, ha animado a todos a "ser capaces de compartir lo que somos, porque es la mejor manera de trascender de nosotros mismos".
A él, un tipo duro y romántico al que le gusta crecer a través de la dificultad, la modalidad que más le ha gustado es la de "a pie", y ello a pesar de que solo probó una vez, puesto que el resto ha ido a lomos de una bicicleta.
Discrepa Serafín Zubiri de cualquier opinión tendente a que el Camino sea "aburrido", "en absoluto", precisa, al contrario, "tiene un veneno especial".
En su caso, lo haría "todas las veces" que le resultase posible, algo que no debe ocurrirle a él solo, ha reflexionado, porque "si cada año viene más gente, pues por algo será".
"Soy un humilde embajador del Camino, de lo que supone realizarlo, y su abogado defensor también", ha confesado este vocalista, que en octubre de 2010 formó parte de un proyecto para realizar a pie el Camino de Santiago con el apoyo de las nuevas tecnologías aplicadas para personas con diversidad funcional y cuya finalidad fue la elaboración de un informe sobre la accesibilidad del mismo.
"No me gusta la palabra 'discapaz', ni minusválido", ha apuntado Zubiri, que ha dicho que "somos diversos desde el punto de vista funcional" y ha observado que él, aún siendo ciego, ve la belleza del Camino de Santiago, porque "tenemos acceso a través de los otros sentidos, como el oído y el olfato... y luego está la curiosidad".
"Galicia huele a Galicia. Hay un olor Galicia", ha expuesto como ejemplo, y, apelando al gusto, ha añadido que esta hazaña de andar por todos estos tramos "la saboreamos los ciegos más de lo que se pueda imaginar".
De todos modos, "¿hasta qué punto todos, videntes o invidentes, vemos las cosas de la misma manera?", ha dejado caer.
Serafín Zubiri ha estado acompañado de su perro guía, Kron, que tiene seis años, y le gustaría enseñarle a su lazarillo este "camino integrador", un comentario que ha suscitado efusivos aplausos entre los asistentes.
Otro músico, Rick Treffers, ha compartido escenario con Serafín Zubiri.
Este compositor, letrista, cantante, guitarrista y productor de Holanda, afincado en Valencia desde hace cuatro años, realizó una gira "muy especial" por el Camino de Santiago, llamada "Cantando por el Camino", en compañía del ruso Alan Lazovski.
Treffers caminó como peregrino convencional por el día y de noche cantó en bares, hoteles, auditorios y pubs. Desde 2013, este "amador de España", como él se ha definido este sábado, utiliza el pseudónimo de "El Turista Optimista", apelativo en el que ha influido una ruta que "no es normal ni tampoco corriente", la cual ha "disfrutado" con la voluntad inquebrantable que lo caracteriza.
Otro artista, pero en este caso de la fotografía, Germán Limeres, ha participado en este congreso y ha hablado de su "Proyecto 108", una cifra que hace referencia a un kilómetro concreto de un tramo del Camino, muy especial para él, en el que hace retratos, los de las "caras de los peregrinos".
Limeres ha hecho los nueve caminos del Camino de Santiago y ha realizado diversas exposiciones fotográficas y publicaciones.
La parte más emotiva de la jornada la ha protagonizado la vocal de la Asociación de Amigos del Camino de la Comunidad Valenciana Pilar Farga, que, con su marido Lorenzo, recorrió esta conocida ruta de peregrinación en 1993, justo cuando ellos cumplieron 25 años de casados.
"Al Camino le debo todo lo que soy ahora", ha subrayado esta compareciente, que ya era feliz, pero desde entonces más, y que superó una enfermedad complicada, en la que le dieron un pronóstico nada halagüeño.
"Ha sido el Camino de nuestra vida", ha enfatizado, mirando a su cónyuge, y ha irrumpido Pilar en sollozos.
