El Ayuntamiento de Pamplona, gobernado por Joseba Asirón (EH Bildu), ha colocado de manera errónea las siluetas de los 5 toros colocados en el corral de Santo Domingo que conmemoran el inicio del encierro de San Fermín y sirven también de reclamo para los turistas.
Este conjunto escultórico con 5 toros a escala real fue colocado en enero de 2022 con el objetivo de realzar esta zona del encierro de San Fermín donde los toros descansan cada noche tras el encierrillo y desde donde comienza el encierro de San Fermín en Pamplona cada mañana de fiestas. Hasta ese momento, la zona era utilizada como aparcamiento y era muy poco atractiva para los visitantes, siendo un lugar destacado del encierro. Junto a la rehabilitación de esa zona de las murallas, también se dejó fijado una parte del vallado del encierro.
La silueta de los toros fue retirada en el mes de junio para habilitar el corral de Santo Domingo y hace solo unos días ha sido repuesta por el consistorio, pero lo ha hecho justo en el sentido contrario a la carrera de los toros y se ha colocado a la manada saliendo hacia la Rochapea, en lugar de comenzando el encierro y enfilando la cuesta de Santo Domingo, la dirección correcta. De esta manera, la obra se ha colocado justo al revés de su idea original, que era reflejar el inicio del encierro.
Los toros, precisamente, reflejan el momento del lanzamiento del cohete y, de izquierda a derecha, los animales pasan de una actitud más estática a otra activa y dinámica simulando la situación en el momento del lanzamiento del cohete que da comienzo al encierro diario.
Este conjunto artístico, que en los últimos meses ha sufrido algunos ataques vandálicos, tiene 5 metros de longitud y una altura de 1,8 metros. Reproduce el perfil de 5 toros a escala real sobre chapa metálica de 10 mm de espesor cortada con láser, mecanizada y lacada al horno de dos componentes de oxirón negro.
El elemento escultórico se sustenta, anclado mediante tirafondos, en tres pilastras de madera de pino Douglas semejantes a los postes del vallado del encierro, de forma que se integra visualmente con esa parte del parte del vallado de San Fermín que permanece durante todo el año en los corrales. Esa estructura, junto con el resto de elementos de cerramiento de la carrera que se mantienen todo el año, ofrece a los turistas la posibilidad de fotografiarse con un elemento representativo de las fiestas.
