Parece que el verano se resiste. A escasas tres semanas para terminar la primavera, y a sólo unos días del famoso 40 de mayo, la inestabilidad meteorológica sigue siendo la nota predominante en las predicciones de Navarra. La culpa es de Óscar, una borrasca que, según explica la Agencia Estatal de Meteorología, está muy bien formada, y que en la actualidad se encuentra sobre el oceano Atlántico, entre Canarias y las Azores.
Dicha borrasca va a barrer la península Ibérica a lo largo de la semana y nos va a dejar precipitaciones que nos van a impedir disfrutar de los últimos coletazos de una primavera que en líneas generales está resultando tormentosa.
Según explican, Óscar va a entrar por el oeste girando en el sentido contrario de las agujas del reloj, impulsada por vientos del sur, por lo que las temperaturas no van a ser especialmente frías. Antes bien, la Aemet pronostica máximas cercanas a los 30 grados practicamente durante todos los días de la semana en Navarra. Al menos hasta el viernes, que es hasta donde alcanza la predicción.
Temperaturas suaves, sí, que no secas, puesto que esta borrasca nos va a dejar lluvia prácticamente a diario. Así, este lunes hemos abierto la semana con cielos poco nubosos, con intervalos de nubes altas, pero la nubosidad de evolucía, al igual que en días atrás, va a ir oscureciendo el cielo y no se descartan chubascos y tormentas que en la mitad norte pueden ser localmente fuertes.
De cara a mañana martes, y el próximo miércoles mantendremos una situación similar, con cielos despejados o con nubes altas por la mañana y posibles tormentas por la tarde, como aviso del paso de la borrasca, que llegará a Navarra ya el jueves, aunque bastante debilitada. Aún así, dejará acumulados de lluvia superiores a los 20 l/m2.
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