Parece que la estabilidad atmosférica, las temperaturas suaves y el sol brillando en todo lo alto tienen las horas contadas en Navarra. Así lo certifica la Agencia Estatal de Meteorología, que anuncia la llegada de varios frentes asociados a una borrasca situada sobre el Atlántico y que pide paso al tiempo que el anticiclón que se ubica sobre el norte de África pierde fuerza y se desplaza hacia el sur.
La península comenzará a notarlo este mismo miércoles por el noroeste, aunque las lluvias no van a llegar a Navarra hasta mañana jueves 8 de febrero. Y desde ahí, un no parar. Varios frentes irán barriendo España dejando importantes acumulados de agua.
Según los mapas del tiempo, el viernes será un día realmente inestable, con viento y lluvia en prácticamente toda Navarra y un importante descenso de las temperaturas máximas.
En concreto, y ya desde este jueves, la AEMET ha activado una alerta por viento en la zona Cantábrica de Navarra y en el Pirineo. La jornada comenzará con cielos nubosos aumentando por la tarde a cubierto cuando se esperan lluvias débiles y chubascos en el norte. Vuelve la cota de nieve a 1400-1600 metros de altura al final del día.
Y ya el viernes 9, el agua será protagonista. Estará nuboso por la mañana con alguna precipitación débil y dispersa, aumentando a nuboso por la tarde con precipitaciones generalizadas. Cota de nieve en torno a 1600 metros. Temperaturas mínimas en ascenso, salvo en el tercio norte donde no se esperan cambios; las máximas en descenso en el sur y el este, sin cambios en el resto. Heladas en el Pirineo. Viento de sur y sureste, fuerte y con rachas muy fuertes en el tercio norte y Pirineos hasta mediodía, amainando por la tarde.
El sábado será una jornada pasada por agua. Según la AEMET tendremos cielo nuboso por la mañana con precipitaciones generalizadas, tendiendo a ceder las precipitaciones en el sur y el centro por la tarde, disminuyendo la nubosidad a intervalos nubosos, con la cota de nieve descendiendo hasta 800-1000 metros y el viento soplando del noroeste.
