La Federación de Bandas de Música de Navarra ha reconocido este martes en el Parlamento que hay "una crisis de cultura popular" tras la pandemia, aunque ha asegurado que en 2023 mantendrá su actividad, que le hace ser además un agente de cohesión social y factor para "hacer pueblo".
No es la primera vez que comparecen en la cámara, ya que en enero de 2021 acudieron para solicitar que fueran declaradas Bien de Interés Cultural (BIC).
Durante una sesión de trabajo solicitada por todos los grupos para conocer su situación, Jesús Soria Magaña, coordinador de la Federación, ha indicado que las bandas son pieza clave de la cultura y sin embargo adolecen de una normalización, por lo que ha instado el apoyo de los grupos, también para un respaldo económico que no pensaban pedir pero que han reclamado ante los ofrecimientos.
De la actividad durante 2021 y 2022 ha destacado los cursos de formación, un ciclo de conciertos en la Ciudadela de Pamplona en colaboración con el Ayuntamiento, el patrocinio de proyectos de varias bandas, las actuaciones de la banda sinfónica que son "la joya de la corona", un festival de agrupaciones de viento, el ensemble de clarinetes, apoyo a las bandas en ciclos de espectáculos o la participación en concentraciones de bandas.
Con 60 bandas en la Federación, que integran a más de 3.000 músicos, Soria ha destacado que están prácticamente todas las que existen en Navarra pero se encuentran en una cierta crisis por causa del covid, que ha traído falta de compromiso con los ensayos, la constatación de que muchas carecen de locales adecuados, desánimo y falta de público, lo que supone "una crisis en la cultura popular".
Sin embargo, ha dicho, las bandas "hacen pueblo", son algo formativo, un intercambio generacional y generadoras de economía local, por lo que ha defendido la necesidad de "crecer todos unidos", informar hacia el exterior de su actividad, formar a sus miembros e intercambiar opiniones y experiencias porque "la unión hace que crezca la fuerza cultural que se manifiesta en la organización de un mayor número de actividades", llegando a localidades más pequeñas para ayudar en la lucha contra la despoblación.
Por eso para 2023 la actividad de la Federación tendrá como ejes cursos y charlas, incluyendo las nuevas tecnologías; ciclos de conciertos como "A Pamplona hemos de ir"; intercambios, ciclos de bandas y espectáculos, apoyo a las bandas federadas y sus proyectos, así como a concentraciones de bandas; la expansión de los ensembles con flautas y saxosofones; la organización de bandas mancomunadas para acometer proyectos de mayor envergadura; y conciertos de la sinfónica.
"Nos está costando mucho pero queremos una Federación fuerte", ha afirmado, y se ha felicitado por el crecimiento de las bandas aunque ha lamentado que las autoridades las hayan "olvidado" e "ignorado" durante la pandemia y que hayan dejado fuera a las de poblaciones pequeñas en programas de actos como el del 3 de diciembre.
Para Navarra Suma, ha dicho Raquel Garbayo, las bandas tienen "un importante cariz social" y son "un claro ejemplo de cohesión territorial", al tiempo que ha puesto en valor su labor formativa y el impulso de espectáculos con un programa muy variado, y todo ello inmersas en complicaciones que abarcaban desde los ensayos hasta las actuaciones, lo que hace que la situación tras la pandemia "no sea la más deseada".
Carlos Mena, del PSN, ha subrayado que pese a la pandemia los proyectos previstos para 2021 y 2022 se han levado adelante, incluso algunos más, y ha destacado iniciativas como la banda sinfónica, los conciertos de la Federación "de mucho nivel" por toda la geografía navarra, unos espectáculos en los que se refleja el "nexo" entre sus integrantes o la formación, por lo que les ha animado a continuar con sus "ambiciosos" proyectos para 2023.
Desde Geroa Bai, Ana Ansa ha comentado que la Federación ha afianzado y profundizado sus líneas de trabajo maestras en un "proyecto común", en "escuelas de ciudadanía" que se dan en muy pocas organizaciones musicales, al tiempo que ha apostado por la comunicación y la formación a músicos, directores y gerentes como pieza importante para no quedarse fuera de muchos proyectos.
Maiorga Ramírez, de EH Bildu, ha calificado de "exitoso" el trabajo de la Federación no solo para cohesionar el territorio sino también para ofrecer a toda la ciudadanía navarra el acceso a la música en directo, por lo que ha mostrado su preocupación por la citada "crisis de cultura popular", lo que refleja que la misma figura en el último lugar en las preocupaciones públicas, por lo que ha abogado por disponer de recursos.
