El vicepresidente de la CEOE, Íñigo Fernandez de Mesa, ha señalado que “en España se ha gastado el dinero en otras cosas, pero no ha habido ayudas directas a las empresas” en relación al proceso de recuperación tras la covid-19.
Fernández de Mesa ha participado en el foro organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección en Navarra (APDN), en el que ha detallado algunas de las claves económicas para la recuperación.
Ha criticado, además, algunas de las posturas del Gobierno de España y ha señalado la necesidad de “desmontar muchos de los tópicos que se están lanzando, a base de decir cosas que no son verdad” en relación a, por ejemplo, el sistema fiscal español o qué se necesita para reducir “el gran problema económico de España”, que es la tasa de paro y la deuda pública.
Ha aseverado que dentro de la Unión Europea ha habido países “mejor o peor” parados, pero “desgraciadamente en España no hemos sido de los mejores, sino al contrario”.
Ha apuntado que en España, la caída económica, “muy abrupta, del 12 %, el doble que Europa”, se debe a varios factores, como los confinamientos “más duros que en otros países” y se suma a que el tejido empresarial “está formado por empresas más pequeñas y vulnerables”.
Además, ha criticado que el Gobierno haya lanzado “muchos globos sonda en materia de regulación”, una cuestión que a juicio del vicepresidente de la CEOE “no ayuda a incentivar la inversión”.
Asimismo ha apuntado que la inversión “sigue atascada” y el nivel de incertidumbre actual “no ayuda a la hora de acometer inversiones”.
Sin embargo, sí ha resaltado como “buena medida” los ERTE aplicados por el Gobierno y también los créditos ICO concedidos a empresas, aunque ha comentado que “muchos de esos créditos tenían que haber sido ayudas directas” a las empresas. “Aquellos países que más han apoyado a las empresas han visto el impacto del coronavirus más pequeño”.
Fernández de Mesa ha manifestado que esta crisis ha sido “internacional e insólita desde la II Guerra Mundial” cuando todos los países del mundo, excepto China, han acabado un año en números rojos. Además, ha apuntado que el comportamiento de las cuentas nacionales ha sido “muy desigual” por el tipo de medidas implementadas en cada país.
En concreto, ha resaltado como positivas las medidas de Estados Unidos, “uno de los países donde menos han sufrido la crisis” ayudado, ha apuntado, por el estímulo “muy concreto y muy enfocado” a través de ayudas directas a empresas y a las familias, con hasta 1.400 euros al mes por familia.
En Europa, ha apuntado, “se está a la cola de la recuperación”, con una caída en 2020 cercana al 7% del PIB y una recuperación prevista para este año del 4,2%, por lo que “en 2022 no se recuperará lo perdido el pasado año”.
Además, esto se une, ha finalizado, a la situación de estancamiento económico que se vive en Europa desde el cuarto trimestre del pasado año.
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