Están en mitad de la travesía de una de las carreteras más peligrosas de Navarra, pero también tiene algunos de los restaurantes más famosos y queridos de la zona.
Fundados a principios del siglo pasado como Posada de caballerías, tras más de un siglo siendo testigo del paso de arrieros, camiones y turistas por el puerto de Belate, va a dejar de estar al pie de la carretera.
Y es que el Gobierno de Navarra ha licitado la redacción del proyecto constructivo de la Variante de Ventas de Arraitz (Ulzama), dentro del plan de conversión de la carretera N-121-A en una vía 2+1.
La redacción del proyecto, que cuenta con un plazo de 12 meses, se licita con un presupuesto base de 300.000 euros. El objetivo de esta actuación es mejorar la seguridad vial y la fluidez del tráfico, favoreciendo la circulación de los vehículos ligeros y reduciendo la peligrosidad de la vía.
Para ello, el proyecto constructivo definirá las obras necesarias que modifiquen el trazado en los subtramos comprendidos entre el punto kilométrico 22+500 y el punto kilométrico 27+600, y entre la boca norte del túnel de Almandoz y el P.K. 35+300, incluyendo la construcción de una variante de trazado de 3 kilómetros de longitud para eliminar la actual travesía de Ventas de Arraitz.
El proyecto contempla la modificación de los enlaces de Belate y Almándoz, donde se incrementará la longitud de los carriles de cambio de velocidad para adaptarlos a la normativa vigente de trazado. Asimismo, se construirá un nuevo enlace con la carretera NA-4230, mediante un paso inferior, para mejorar la conexión de la zona.
La actuación también incluirá la construcción de varias estructuras fundamentales para la funcionalidad y la integración ambiental de la carretera, como son un puente de 15 metros de longitud sobre la regata Legarza; un viaducto de 85 metros sobre el río Ulzama; y dos nuevos pasos específicos de fauna, un paso superior de 30 metros de anchura y un paso inferior de 15 metros de anchura y 3,5 metros de altura libre.
Estas infraestructuras contribuirán a mejorar la permeabilidad de la N-121-A, facilitando el tránsito de fauna y reduciendo el impacto de la carretera en el entorno.
