Mitxel Lakuntza ha sido reelegido este martes como secretario general del sindicato ELA con un respaldo del 90,3 % de los votos emitidos por los más de 700 delegados reunidos desde ayer en Bilbao en el XVI Congreso Confederal de la organización. La candidatura, la única presentada y de carácter continuista, ha sido avalada por 629 congresistas, mientras que 47 han votado en contra y 18 en blanco.
Lakuntza, nacido en Pamplona en 1976 y al frente del sindicato desde abril de 2019, ha revalidado así el apoyo recibido en el congreso anterior, celebrado en noviembre de 2021, cuando obtuvo un 90,6 % de respaldo.
En la nueva dirección del sindicato continúa también Amaia Muñoa, nacida en Aix-En-Provence en 1974, que seguirá como secretaria general adjunta y responsable del área internacional.
La nueva ejecutiva de ELA incorpora tres caras nuevas: Ane Bilbao, de Vitoria y nacida en 1993, asumirá la responsabilidad de los servicios jurídicos; Unai Oñederra, de San Sebastián y nacido en 1973, estará al frente de la formación, la estrategia soberanista y la acción en el País Vasco francés; y Luis Fernández, de Pamplona y nacido también en 1973, será el nuevo responsable de sindicalización, militancia y actos confederales.
Completan el equipo Leire Gallego (Vitoria, 1989), al frente de las políticas de igualdad de género, acción social y migración; Iván Giménez (Pamplona, 1976), responsable de comunicación; Pello Igeregi (Sopela, 1981), que continuará en las áreas de negociación colectiva, salud laboral y Euskara; Alazne Mantxola (Legazpi, 1988), como tesorera; Aitor Murgia (Berango, 1988), al frente del gabinete de estudios, políticas sociales y medioambientales; y Ane Miren Zelaia (Durango, 1989), responsable de afiliación y elecciones sindicales.
Durante la jornada también se ha aprobado, con un único voto en blanco, la ponencia estratégica que guiará la acción del sindicato durante los próximos cuatro años. ELA ha reafirmado su apuesta por un sindicalismo sociopolítico y de contrapoder, con más movilizaciones y huelgas para lograr avances laborales ambiciosos.
Entre sus objetivos destacan conseguir aumentos salariales por encima del IPC, la reducción de la jornada laboral, reforzar la militancia, ampliar la sindicalización en los centros de trabajo y avanzar hacia una organización más equitativa en términos de género.
El texto aprobado en el congreso incide en la necesidad de mantener una línea de confrontación con las instituciones para hacer frente a la precariedad y a lo que considera una situación de opresión política. El sindicato critica a los partidos de izquierda que gobiernan en las instituciones vascas por haber renunciado, en su opinión, a la confrontación, y considera “débil” la respuesta institucional ante lo que percibe como un proceso de relegitimación del Estado español.
En relación con su relación con otros sindicatos, ELA ha subrayado que “desgraciadamente” sus caminos y los de LAB se han separado. Según su análisis, hay tres obstáculos principales para la colaboración entre ambas centrales: la existencia de estrategias y herramientas distintas en la negociación colectiva, la influencia de Sortu y EH Bildu en la línea de actuación sindical de LAB y el retorno de esta última a la participación institucional.
En la jornada de hoy también se han aprobado por unanimidad tres resoluciones que reafirman el enfoque político del sindicato: una a favor de avanzar hacia una soberanía basada en la justicia social, otra contra el belicismo y la militarización de Europa, y una tercera que defiende el derecho a decidir un Salario Mínimo Interprofesional propio para Euskadi.
