La Policía Nacional confiscó ayer un artefacto explosivo que había sido recuperado del río Arga utilizando la técnica de arrastre con imanes de neodimio.
Según el primer análisis, el artefacto podría datar de la Guerra Civil, estaba cargado con explosivo militar y presentaba daños en sus elementos de iniciación, lo que incrementa su peligrosidad.
Debido a su deteriorado estado de conservación y al riesgo que representaba, el Grupo de Desactivación de Explosivos y Nuclear, Radiológico, Biológico y Químico de la Brigada Provincial de Información de Navarra procedió a su traslado a dependencias policiales para su análisis y posterior destrucción.
En este contexto, la Policía Nacional advierte a la ciudadanía sobre los peligros de este tipo de prácticas. Un artefacto explosivo, aunque parezca antiguo, puede conservar su sistema de iniciación intacto y estar cargado con explosivos de alto poder rompedor, manteniendo su estabilidad y propiedades a lo largo del tiempo, lo que representa una grave amenaza para las personas.
La Policía nacional ha solicitado a la ciudadanía que, si se encuentra con un artefacto de estas características, "no se toque, ni manipule", y recomienda ponerse en contacto de inmediato con los servicios policiales.
