La Policía Foral ha detenido recientemente en Sarriguren a un hombre de 31 años, de nacionalidad dominicana, por octava vez, acusado de un delito de tráfico de drogas. Tras ser puesto a disposición judicial, ha ingresado en prisión.
La investigación se inició en junio, cuando diversas informaciones recibidas por la Policía Foral indicaban que en dos bares de la localidad y un domicilio se estaban vendiendo sustancias estupefacientes. Los vecinos habían denunciado un aumento de molestias e inseguridad debido a peleas y al trasiego de personas a horas inusuales en la zona conocida popularmente como “las ramblas” de Sarriguren.
Se establecieron dispositivos de vigilancia que confirmaron que el detenido vendía papelinas tanto en la terraza del bar como en su interior. En más de una ocasión, el traficante se hacía acompañar por su hijo menor para ocultar los “pollos” en su pañal.
Con las pruebas recopiladas, se solicitó al juzgado de Aoiz autorización para entrar y registrar su domicilio, ubicado cerca del lugar donde el detenido realizaba sus actividades ilícitas. Durante el registro, se incautaron 400 gramos de cocaína, 505 gramos de hachís, 112 gramos de ketamina, 83 gramos de marihuana y varias dosis de cocaína rosa o “tusi”.
Es importante resaltar el riesgo que conlleva el hallazgo de esta droga, ya que está compuesta por una mezcla de sustancias con efectos impredecibles y de alto riesgo para el consumidor, debido a la falta de conocimiento sobre su contenido, que puede incluir un cóctel de MDMA, ketamina, metanfetamina y otras sustancias, las cuales recientemente causaron la muerte de un conocido cantante.
Asimismo, se encontraron 10.800 euros presuntamente derivados del tráfico de drogas, junto con herramientas y materiales necesarios para la elaboración y distribución de las sustancias estupefacientes, como básculas de precisión y alambre para cerrar las bolsas que contienen las dosis.
El detenido, que cuenta con siete antecedentes por diversos delitos y múltiples denuncias por tenencia y consumo de drogas, fue puesto a disposición judicial en Aoiz, donde se decretó su ingreso en prisión. En la investigación han participado policías forales de la comisaría de Pamplona, adscritos a la División de Seguridad Ciudadana (Prevención y Guías Caninos) y la División de Policía Judicial (Grupo de Delitos contra la Salud y Brigada Judicial Norte).
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