Pasó como en las películas. Iba a ser una pequeña reunión de amigos de la universidad en un piso de estudiantes, pero se les fue de las manos. Comenzó a sumarse gente y cuando se dieron cuenta, el ruido que salía de la vivienda era infernal.
Los vecinos fueron tolerantes hasta determinada hora, pero llegó un punto en el que no pudieron más y a las 0:45 horas del viernes al sábado llamaron a la Policía Municipal de Pamplona, que acudieron con un sonómetro hasta el edificio, ubicado en la calle Iturrama de Pamplona.
La sonometría dio resultado positiva, medida desde el domicilio de los denunciantes, por lo que los agentes procedieron a disolver la fiesta.
Tras identificar a los responsables del piso de estudiantes, que lamentaron las molestias y pidieron disculpas a los vecinos, los invitados de la fiesta comenzaron a salir del piso en cuestión.
Uno, dos, tres... hasta 45 personas estaban bailando y haciendo botellón en el piso. Los agentes dieron traslado del acta al área de Sanidad del Ayuntamiento de Pamplona, que se encargará de imponer la correspondiente sanción económica.
- Los comentarios que falten el respeto y que no se ciñan al tema de la noticia, podrán ser eliminados.
- Cada usuario será el único responsable de sus comentarios.