Ainhoa Múgica, conocida como ‘Olga’ y considerada durante años una de las principales responsables del aparato militar de ETA, ha reconocido este jueves ante la Audiencia Nacional que dio la orden para asesinar con un coche bomba a José Javier Múgica Astibia, concejal de Unión del Pueblo Navarro (UPN) en Leiza, el 14 de julio de 2001.
Durante el juicio, al que han acudido en representación de UPN la secretaria general, Cristina Sota, y el miembro del comité ejecutivo, Juan Frommknecht, la exdirigente etarra se ha limitado a responder “sí” cuando la presidenta del tribunal le ha preguntado si se reconocía autora de los hechos. La Fiscalía mantiene su petición de 42 años de prisión y 70 de inhabilitación absoluta por los delitos de asesinato terrorista y estragos, además de la prohibición de residir en Leiza durante 10 años y de acercarse a menos de 200 metros de los familiares de la víctima.
Una agente de la Policía Nacional, que ha declarado como perito en el proceso, ha destacado la existencia de dos elementos “fundamentales”: una nota manuscrita y la posición orgánica de Múgica dentro de la banda. Según el escrito de acusación, la acusada elaboró junto a Andoni Otegui, miembro del comando encargado de ejecutar el atentado, un dibujo de una furgoneta y unas instrucciones en euskera que detallaban cómo debía realizarse el ataque.
El Ministerio Público describe que el atentado fue cometido mediante la colocación de un artefacto explosivo tipo lapa, con entre 2 y 3 kilos de dinamita Titadyne, bajo el vehículo del concejal. La bomba estalló cuando Múgica Astibia arrancó su coche aquella mañana, provocándole la muerte de forma instantánea.
Los autores materiales del asesinato —Andoni Otegui Eraso, Óscar Celaraín Ortiz y Juan Carlos Besance Zugasti— integraban el comando Argala y fueron condenados en 2011. Actuaban bajo las órdenes directas de Ainhoa Múgica, según recoge la acusación.
La dirigente terrorista fue detenida el 16 de septiembre de 2002 junto a José Antonio Olarra Guridi, también dirigente de ETA, en la localidad francesa de Talence, cerca de Burdeos, en el marco de una operación conjunta de la Policía Nacional española y la Policía Judicial francesa.