Según las previsiones del Ministerio de Sanidad y la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), la alerta afecta a esta zona de Navarra, mientras que en la Vertiente Cantábrica se ha activado la alerta naranja sanitaria por calor y una amarilla por tormentas y granizo.
El ISPLN advierte que el calor excesivo puede provocar alteraciones en el cuerpo, como calambres, agotamiento, deshidratación, piel caliente y enrojecida. Si estos síntomas persisten o se presentan problemas como alteraciones de la conciencia, pulso rápido y débil o respiración superficial, se recomienda contactar con el 112 para evitar un golpe de calor.
Para prevenir estos efectos, las autoridades instan a la población a seguir una serie de medidas preventivas, como beber agua de forma continua, evitar esfuerzos físicos excesivos durante las horas de más calor y evitar la exposición al sol, especialmente en colectivos vulnerables como personas mayores de 65 años, menores de 4 años, mujeres embarazadas, personas en lactancia o trabajadores expuestos al calor.
El ISPLN también recomienda evitar bebidas alcohólicas, cafeína o azucaradas, mantenerse en espacios frescos, ducharse con agua templada o fría y usar sombrero y ropa ligera. Además, se debe evitar permanecer en vehículos estacionados al sol, especialmente cuando haya menores, personas mayores o animales dentro.
Según el último informe del Plan de prevención de los efectos en salud de las altas temperaturas, en 2024 se notificaron 82 casos de patologías asociadas al calor, de los cuales un 37,8% (31 casos) se produjeron durante la actividad laboral. Los trabajos al aire libre son los más expuestos a los efectos del calor, aunque también se notificaron incidentes en centros laborales interiores.
El ISPLN subraya la importancia de que las empresas identifiquen y evalúen el riesgo de estrés térmico en sus trabajadores, especialmente durante los días con alerta sanitaria por temperaturas elevadas. También se recomienda garantizar una vigilancia específica de la salud, especialmente en trabajadores vulnerables, y fomentar un proceso de aclimatación al calor.
Además, se insta a las empresas a implementar medidas preventivas, como programar los trabajos más pesados durante las horas de menor calor, asegurar el funcionamiento de la climatización en espacios cerrados y habilitar zonas de sombra en exteriores para descanso.
El Departamento de Salud ha lanzado este año la campaña 'Cabeza fría contra el calor / Burua hotz beroaren aurka', con el fin de sensibilizar a la población sobre los riesgos de las altas temperaturas. La campaña incluye un cuadríptico informativo con recomendaciones específicas para empresas y trabajadores, disponible en seis idiomas: árabe, búlgaro, francés, inglés, portugués y rumano.
El mensaje de la campaña es claro: prevenir es la clave para evitar los efectos negativos del calor sobre la salud.
