El Ayuntamiento de la Vilavella (Castellón) ha recibido una demanda por parte de la familia de un joven fallecido en 2016 en los festejos taurinos de las fiestas de Sant Xotxim, en la que reclama al consistorio una cantidad de 400.000 euros al considerar que la muerte fue por causa de irregularidades en el recinto taurino.
El consistorio ha publicado un comunicado en su muro de Facebook para poner en situación a todos los vecinos, según ha confirmado el alcalde del municipio. El primer edil señala en el escrito que la cantidad económica que se les demanda es "casi la cuarta parte del presupuesto municipal" y confía en que la demanda no prospere.
"Pensamos que estaba todo en regla, toda la documentación era correcta y se habían hecho todas las revisiones pertinentes", defiende consistorio, que explica que han recibido la demanda porque "el alcalde, el regidor/ora o policía local en quien delegue, deben ser los directores de cualquier espectáculo taurino que se celebra en el pueblo, sea o no organizado por él".
El Ayuntamiento se ha puesto en contacto con los servicios jurídicos para trasladarles la demanda y que esta pueda ser evaluada. Además, el equipo de Gobierno se ha reunido con las comisiones que se encargan de las fiestas para "explicarles la situación" y recordar lo que desarrolla el decreto de 'Bous al carrer' de 2015 y "todos los puntos más delicados respecto a la seguridad".
En este sentido, se hace mención a aspectos como que en el recinto de los toros no puede haber sillas ni mesas ni elementos que dificulten el festejo, la prohibición de menores o la expulsión de las personas que no estén en condiciones. El Ayuntamiento asegura que estará "en todo momento al lado de los barrios y sus fiestas" y les ha manifestado su apoyo para que las fiestas sigan "sin problemas y que no se cometa ninguna ilegalidad que puede terminar en un susto o una demanda en los juzgados".
ACCIDENTE POR UN TROPEZÓN
El fallecimiento del joven se produjo en agosto del pasado año en el último acto taurino de las fiestas del barrio de Sant Xotxim. Según informó en su momento el consistorio en un comunicado, los hechos sucedieron tras la salida del segundo toro programado y el último de las celebraciones populares.
El astado irrumpió en una de las calles incluidas en el recinto y cogió de imprevisto a varios aficionados, entre ellos el fallecido, de 36 años. Según relataron testigos presenciales, todo fue consecuencia de un accidente porque el joven tropezó antes de que fuera alcanzado por el astado, que le embistió en varias ocasiones y le provocó varias heridas incompatibles con la vida. Mira aquí cómo fue la cogida.