Los jugadores de Osasuna han desarrollado este viernes en las instalaciones de Tajonar su tercera sesión a puerta cerrada como medida de prevención por la problemática del COVID-19.
El conjunto rojillo ha vuelto a ejercitarse a través de técnica, fútbol-tenis, posesiones y partidos. Rubén García ha proseguido con el plan de trabajo que le habían sido diseñado antes de la suspensión de la competición, con el objetivo de recuperarse de la carga de minutos.
Por su parte, el delantero Kike Barja ha recibido tratamiento y ha realizado trabajo específico para iniciar su recuperación de la lesión muscular en el bíceps femoral de la pierna izquierda.
La plantilla tendrá descanso durante el fin de semana y está previsto que retome la actividad el próximo lunes a las 10:30 horas en las instalaciones de Tajonar, nuevamente, a puerta cerrada.
