El Ayuntamiento de Pamplona ha anunciado el cierre de los ascensores de Descalzos que unen el barrio de la Rochapea con el Casco Antiguo de la ciudad.
Los elevadores, ubicados bajo la muralla en la calle Descalzos, son uno de los más antiguos y más utilizados de la ciudad. Su instalación se enmarcó en un proyecto de reurbanización del paseo de Ronda y Descalzos, financiado en parte por la Unión Europea a través del Plan Urban.
Conectan ambas zonas en apenas un minuto, salvando un desnivel vertical de 29,6 metros a razón de 1 metro por segundo. Cada cabina puede transportar hasta 1.500 kilos de peso, con capacidad para 15 a 20 personas y un máximo de 2 bicicletas por trayecto.
Entre las dos cabinas, se calcula que realizan más de 570.000 viajes al año, con un uso estimado de casi 6 millones de personas anuales, lo que los convierte en un elemento esencial de movilidad urbana en el corazón de Pamplona.
Según ha anunciado el consistorio, la interrupción del servicio será puntual y nocturna, mientras se realizan las tareas de limpieza del hueco y de las rampas, dentro del mantenimiento periódico programado.
El cierre está previsto para la noche del 18 al 19 de junio.
