Pamplona limitará el tráfico en una transitada calle del entorno hospitalario para implantar un nuevo carril bici. Solo podrán pasar ambulancias y villavesas.
El Ayuntamiento ha aprobado el proyecto de carril bici y mejora peatonal en la calle Irunlarrea, junto al Complejo Hospitalario de Navarra. Las obras comenzarán en la segunda quincena de julio y está previsto que concluyan antes de final de año. Como parte de esta intervención, la calle dejará de ser un eje de paso entre las avenidas Pío XII y Barañáin, restringiendo el tránsito de vehículos privados.
Solo podrán circular por esta vía ambulancias, transporte público y vehículos particulares con destino a los aparcamientos del hospital. Para controlar estos accesos, el Ayuntamiento instalará cámaras de videovigilancia con lectura de matrículas que permitirán sancionar a los conductores que incumplan las nuevas restricciones de paso.
El objetivo es transformar la movilidad del entorno hospitalario apostando por la sostenibilidad: se construirán 600 metros de carril bici segregado, se ampliarán las aceras hasta 3,75 metros en algunos tramos, y se instalarán tres pasos peatonales elevados, además de nuevas paradas avanzadas para autobuses. El presupuesto de la obra asciende a 549.984 euros.
El nuevo carril bici no eliminará carriles de circulación, pero sí modificará el actual trazado. En algunos tramos irá por la calzada y en otros ocupará parte de zonas ajardinadas que se reconvertirán en aceras. Como primer paso, el Ayuntamiento ha solicitado al Gobierno de Navarra la desafectación de 800 m² de terrenos del hospital, de su titularidad, para destinarlos a uso viario.
Esta actuación se enmarca en la estrategia de movilidad sostenible de Pamplona, que busca reducir el uso del coche privado, mejorar la accesibilidad peatonal y priorizar el transporte público y la bicicleta.
