El éxito de participación de la ciudadanía de Pamplona en la festividad de San Saturnino, y especialmente en el novedoso evento de suelta de farolillos homenajeando a la ciudad hermana de Bayona está siendo utilizada también por la oposición municipal de Pamplona como un arma arrojadiza contra el equipo de gobierno de Cristina Ibarrola.
Los grupos del PSN en el consistorio pamplonés y Contigo Navarra han criticado lo que consideran una falta de previsión del gobierno municipal.
Desde Contigo se ha denunciado lo que consideran pésima organización del evento asegurando que "se falló estrepitosamente en las previsiones; ni se cortó el tráfico en la avenida del Ejército, ni hubo ningún control de aforos". Estas negligencias, según el concejal Txema Mauleón, "provocaron momentos de caos".
Un Mauleón que tiene competencias directas en el gobierno de la Mancomunidad de Pamplona, responsable de las villavesas, y que, por lo mismo de lo que acusa al equipo de Gobierno, no previó la afluencia masiva de gente y no puso ni una sola línea de refuerzo y el transporte estuvo sumido en el caos desde mucho antes de que arrancara la suelta de farolillos o se colapsara la avenida del Ejército.
Pese a todo, el edil asegura que "pediremos explicaciones a UPN por esta pésima organización y que se haga una evaluación rigurosa de qué ha fallado".
Por su parte, los socialistas, que reconocen al menos el éxito de la convocatoria y valoran positivamente los actos organizados
para el día de San Saturnino, sostienen que no se cumplieron los protocolos exigidos" para garantizar la seguridad y que la masificación provocó el colapso en las calles y carreteras, impidiendo que los bomberos pudiesen llevar a cabo las labores de seguridad reclamadas para este tipo de actos.
