El Gobierno de Navarra, que preside la socialista María Chivite, ha vuelto a demostrar su incapacidad para la gestión y se ha visto obligado a renunciar a una ayuda de 2,8 millones de euros que ya estaba concedida para la construcción de una planta de hidrógeno verde en Tudela.
Lo más grave del asunto es que el recién nombrado consejero de Universidad, Innovación y Transformación Digital, Juan Luis García, conociendo la renuncia del Gobierno a la ayuda por su incapacidad para buscar inversores, ocultó deliberadamente información al Parlamento de Navarra.
Así lo ha denunciado UPN, que asegura que García, “ocultó información de relevancia” solicitada en sede parlamentaria y por los cauces legales, después de conocer que, con fecha 11 de noviembre de 2024, la sociedad pública Ciudad Agroalimentaria de Tudela (CAT) envió un documento al IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía) solicitando el desistimiento expreso de la ayuda económica que se había solicitado para la futura planta de hidrógeno verde y que ascendía a 2.884.481,25 € de fondos europeos Next Generation, dentro del PERTE de Hidrógeno Renovable.
Asimismo, en su escrito, la CAT informaba de que el planteamiento de su participación en el proyecto de la planta de hidrógeno verde sería mediante un alquiler/venta de parcela en el polígono, así como un acompañamiento durante las distintas etapas de su desarrollo y ejecución.
No obstante, en el pleno de control al Gobierno de Navarra celebrado el pasado 13 de febrero, a la pregunta del parlamentario Ángel Ansa acerca de la posibilidad de perder la ayuda concedida si la planta no se construía, de acuerdo con el proyecto que se había sido presentado, antes del 31 de marzo de 2026, el consejero se limitó a responder que el Gobierno continuaba explorando otras opciones para hacer realidad el proyecto, tras no haber conseguido un socio privado, y que el IDAE estaba siendo informado en todo momento.
Así, UPN denuncia que "en ningún momento reveló la existencia del documento de desistimiento de la ayuda y del cambio de orientación del proyecto, pese a que se había enviado al Ministerio tres meses antes y este ya lo había estimado y resuelto con fecha 3 de febrero”.
Para UPN, “resulta muy grave que el consejero García nos ocultase una información de tal envergadura en su respuesta en sede parlamentaria, siendo plenamente conocedor de la información desde el pasado mes de noviembre, lo que demuestra una enorme falta de respeto a la labor de la oposición y un oscurantismo intolerable que no tiene ninguna justificación”.
