SAN FERMÍN 2025
Un toro suelto de Cebada Gago siembra el pánico y cornea en el segundo encierro de San Fermín
El torno número 23, de nombre Caminante ha sembrado el pánico tras hacer más de media carrera en solitario y embistiendo.

Peligrosísimo encierro de protagonizado por la ganadería gaditana de Cebada Gago en el segundo encierro de las fiestas de San Fermín. El toro número 23, de nombre Caminante, se ha quedado rezagado y ha hecho la mitad del recorrido en solitario sembrando el pánico en la calle Estafeta y los tramos de Telefónica y el callejón de la plaza.
La carrera, que ha tenido una duración total de 5 minutos y 22 segundos, ha comenzado con los cabestros a toda velocidad, muy por delante de la manada. Tras un paso fulgurante por la cuesta de Santo Domingo, la manada se ha reagrupado en la plaza del Ayuntamiento. Desde ahí, Caminante se ha convertido en protagonista. Mientras sus hermanos se dirigían en fila de a uno hacia la plaza de toros sin mayor problema, el astado de Cebada perdía las manos y se giraba en la calle Estafeta.
Con ayuda de los mozos le han dado la vuelta y desde ahí, en un lento trote ha seguido la inercia de la carrera, pero girándose continuamente, despistándose con los corredores que encontraba en su camino y, sobre todo, embistiendo. El tramo de mayor peligro ha sido la bajada al Callejón, donde Caminante ha embestido no sólo el vallado del encierro, sino también y con violencia extrema, a los cabestros de cola.
Según ha informado Cruz Roja, hay un herido por asta de toro en el tramo de Espoz y Mina. Pero pudo ser mucho peor. El toro no ha dejado de fijarse a ambos lados del recorrido embistiendo el vallado y provocando continua situaciones de peligro.
Además del mozo corneado, siete corredores más han precisado ser trasladados al Hospital Universitario de Navarra, todos ellos por golpes y caidas.
Los Cebada Gago, la segunda ganadería que más veces ha corrido por las calles de Pamplona, solo por detrás de Miura, protagonizaron el año pasado un encierro rápido y peligroso, que dejó al menos seis corredores trasladados al hospital, aunque ninguno de ellos herido por asta.
En sus últimos años, los toros de Cebada Gago habían dejado 61 heridos por asta de toro en sus 33 participaciones anteriores, lo que da a una buena muestra del peligro al que se exponían los mozos en el encierro. Es más, 19 de sus 61 corneados en San Fermín se produjeron un 8 de julio, convirtiendo esta jornada en la más peligrosa cada vez que aparece este hierro en el cartel. Una cifra que para los corredores no es solo un dato, sino una auténtica advertencia.
Los astados de Cebada Gago serán lidiados en la tarde de ste 8 de julio por los diestros Antonio Ferrera, Pepe Moral -en lugar del convaleciente Víctor Hernández- y Román en la cuarta de feria, segunda de abono de los festejos taurinos de San Fermín.
Roja y verde