SOCIEDAD
Un arquitecto navarro recibe un importante premio internacional por el diseño de una capilla en Cáceres
Esta capilla ha sido la única europea premiada en esta edición, compartiendo reconocimiento con figuras como Santiago Calatrava.

El American Institute of Architects (AIA) ha concedido el Premio de Honor en la categoría de Renovación al arquitecto navarro Pablo Guillén Llanos por la capilla del Seminario Mayor de Plasencia (Cáceres), en el marco de los Faith&Form International Awards 2024, que reconocen las mejores intervenciones arquitectónicas, artísticas y de diseño litúrgico en espacios religiosos de todo el mundo.
Esta capilla ha sido la única intervención europea premiada en esta edición, compartiendo reconocimiento con otras figuras destacadas como Santiago Calatrava, galardonado por su trabajo en una iglesia en Nueva York en la categoría de nuevas instalaciones.
Sobre la capilla del Seminario de Plasencia, el arquitecto destaca “la aparente simplicidad de la solución y la economía de los materiales”, así como el carácter artesanal de toda la intervención. “Se ha diseñado todo: la falsa bóveda, el tirador de las puertas, la reja del coro… Quería que pareciera que todo había estado siempre ahí. Aunque es nueva, debía tener ese regusto de permanencia”, asegura Pablo Guillén.
El sagrario, hecho ex profeso para esta obra, es obra del reconocido arquitecto Heliodoro Dols, estrechamente vinculado a la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la Universidad de Navarra, y amigo personal de Curro Inza y César Ortiz-Echagüe. Los bancos son originales de Miguel Fisac: “comodísimos y muy baratos”, apunta, “cuando algo funciona tan bien, no hace falta reinventarlo”.
La mayor dificultad del proyecto ha estado en la ejecución: “Encontrar gremios realmente artesanos —carpinteros, herreros, albañiles— que trabajen con detalle y paciencia, ha sido lo más complicado. O no existen, o los que quedan están acostumbrados a resolver sin reflexión, lo que obliga muchas veces a rehacer lo hecho cuando el proyecto se sale de lo habitual”.
Este nuevo premio se suma al obtenido por Guillén Llanos en 2019 por la capilla del edificio central de la Universidad Pontificia de Salamanca (UPSA), una obra que recibió un amplio reconocimiento nacional e internacional. Fue precisamente a raíz de aquella intervención que surgió el encargo de Plasencia: la capilla llevaba años inacabada y, tras el impacto de la capilla de Salamanca, los responsables del Seminario decidieron retomar el proyecto.
Actualmente, el arquitecto trabaja entre Pamplona y Valladolid, y comparte estudio con Javier López de Uribe, Fernando Zaparaín, Fermín Antuña y Eduardo García. Aunque no se dedica específicamente a arquitectura religiosa, este tipo de trabajos le van llegando de forma natural, por recomendación y boca a boca. “Acabo de terminar otra capilla en la Facultad de Comunicación de la UPSA y tengo una más en marcha en Valladolid, esta vez junto a mis compañeros de estudio”, explica. Su estudio desarrolla todo tipo de proyectos para cliente privado, desde bodegas como Pago de Carraovejas u Ossian, hasta edificios sanitarios, reformas de vivienda o locales comerciales.