SOCIEDAD
Las Becas Alumni de la Universidad de Navarra cumplen 20 años: así funciona esta "cadena de agradecimiento"
El programa, dirigido a estudiantes con talento, pretende captar 15 millones de euros adicionales para dotar 75 “Becas Perpetuas”.
El programa, dirigido a estudiantes con talento, pretende captar 15 millones de euros adicionales para dotar 75 “Becas Perpetuas”.
La doctora Lilia Ceballos, graduada en Medicina en 1968, fue la primera becaria de la Universidad de Navarra. Llegó a Pamplona desde México para hacer realidad su sueño: estudiar en este campus, licenciarse en Medicina y desarrollar una larga carrera ayudando a pacientes, labor que realizó en Estados Unidos. Allí se convirtió en la primera alumni que donó dinero a la Universidad para que otros estudiantes cumplieran sus aspiraciones. Sin saberlo, fue “el caso cero” de la gran cadena de agradecimiento de las Becas Alumni, el programa propio de becas del centro académico, que ahora cumple 20 años.
Esta iniciativa se puso en marcha en 2003 con el objetivo de que alumnos con talento puedan cursar sus estudios en la Universidad de Navarra con independencia de su situación económica, una idea que forma parte del espíritu fundacional de esta institución. Desde entonces, se han beneficiado de estas ayudas más de 1.900 universitarios, que han recibido 39,6 millones de euros.
El Programa, que se sostiene gracias a la aportación de empresas, amigos de la Universidad, antiguos alumnos y de otras personas e instituciones que creen en el proyecto del centro académico, ha contado durante estas dos décadas con donaciones de 17.371 personas físicas y 51 empresas.
“Las Becas Alumni apuestan por el talento de los estudiantes y constituyen una cadena de agradecimiento, en la que los beneficiarios de las ayudas adquieren el compromiso moral de colaborar con el mismo Programa cuando les sea posible”, explica Javier Ortega, director del Servicio de Desarrollo de la Universidad de Navarra. El resultado, según afirma, son “estudiantes comprometidos con su formación, y profesionales con una excelente preparación y visión solidaria”.
Es el caso de Warren Santiago, que se graduó el curso pasado en Ingeniería en Diseño Industrial y actualmente trabaja en un estudio de diseño en Barcelona. Natural de Filipinas, aunque residente en España desde los 7 años, echa la vista atrás y recuerda cómo de inimaginable era para él estudiar aquí. “Yo en 2019 no pensaba llegar a esta meta. Mi familia no podía permitirse esta Universidad”. Pero cuando viajó con su colegio de Tarragona a Pamplona para conocer el campus, fue “amor a primera vista”. Por eso, recuerda el día en que recibió la carta de la Beca Alumni como “uno de los mejores de su vida”. De este modo, Warren agradece a los que están detrás. “No tengo duda de que, si puedo hacerlo, en el futuro ayudaré a otros alumnos para que puedan estudiar aquí”.
Es el ciclo de la generosidad, que en cifras se concreta en 1.947 estudiantes beneficiados en 20 años; 781 de ellos, durante la totalidad de sus estudios. Este curso 2023-24, 428 alumnos poseen una beca Alumni. Asimismo, del total de donaciones (39.627.887 euros), un 93% fueron recurrentes y un 7% puntuales, con una media de donación de 60 euros, por parte de personas físicas. Respecto a las empresas y fundaciones, la Universidad ha recibido 667.000 euros de media procedentes de las 19 entidades que más han aportado al programa.
La cantidad destinada a Becas Alumni procede también de un fondo o endowment, una cartera de activos que sirve para financiar de manera estable el programa. Actualmente, ese endowment es de 11.299.603 euros, que en este curso 23-24 ha aportado 425.123 euros del total de 3.692.523, que la Universidad ha destinado a becas. Asimismo, el objetivo es captar 15 millones de euros adicionales para este fondo en los próximos cinco años, coincidiendo con el 75 aniversario de la Universidad. Con esta cantidad se podría dotar 75 becas adicionales, por un importe medio de 7.500 euros.
Estas ayudas reciben el nombre de Becas Perpetuas porque cuando el estudiante termina sus estudios, la beca pasa a otro alumno. Para contribuir con ellas se puede realizar una aportación al endowment o constituir un fondo, con una cantidad mínima de 200.000 euros fraccionables entre cinco y siete años. Este carácter perpetuo de la beca asegura la recurrencia y perdurabilidad del impacto.
Con aportaciones pequeñas o grandes, muchos de los donantes serán eslabones de esa cadena que comenzó con Lilia en los años sesenta. “Gracias a muchos pocos, que nunca conocí, hice realidad un sueño increíble. Y cuando uno ha recibido tanto, lo único que queda es ayudar a otros que nos están esperando. Porque lo que hacemos en el presente repercute en la eternidad”, explica esta graduada. Una cadena de generosidad y agradecimiento que apuesta por el talento de estudiantes de todas las carreras y nacionalidades, y a seguir haciendo realidad el espíritu fundacional de esta institución académica.
La Universidad de Navarra conmemoró el día 23 de noviembre el 20 aniversario de las Becas Alumni. En el evento participaron más de un centenar de antiguos alumnos que estudiaron en la Universidad gracias a estas ayudas, jóvenes que hoy en día, desde diferentes ámbitos profesionales, aportan su talento a la sociedad. El programa comenzó con un discurso de la rectora, María Iraburu, titulado “Presente y futuro de la Universidad. Un impacto perdurable”.
A continuación, se celebró un coloquio intergeneracional sobre los valores distintivos que aporta estudiar en la Universidad. En él intervinieron cinco antiguos alumnos y una estudiante, algunos de ellos donantes y otros beneficiarios de la beca: Sebastián Albella (Derecho), socio del despacho Linklaters; Isabel Sola (Biología), codirectora del Grupo de Coronavirus del Centro Nacional de Biotecnología; Alejandro Beltrán (Económicas), socio-director de McKinsey & Company; Juan Guerrero (Económicas y Derecho), director de Willis Towers Watson; Mariona Bosch (Ingeniería), key account manager en Parker Hannifin; y Paloma Avilés, alumna de Medicina.
El acto concluyó con una sesión sobre “El impacto social de las Becas Alumni”, a cargo de Isabel Olloqui, directora de Desarrollo Corporativo de la Universidad, y Alberto Horcajo, presidente de la Fundación IMPACTUN, una de las mayores donantes del Programa.
A continuación puedes conocer los detalles de las Becas Alumni en cifras:
1.947 estudiantes se han beneficiado del Programa desde 2003.
781 graduados han cursado la totalidad de sus estudios con esta ayuda.
Se han aportado 39.627.887 euros.
Este curso 23-24 son 428 alumnos que cursan sus estudios con una beca Alumni.
17.371 personas físicas y 51 empresas han colaborado con el Programa.
Un 93% de las donaciones son recurrentes y un 7% puntuales.
La media de donación es de 60 euros, por parte de personas, y de 667.000 euros, por parte de las 19 empresas que más han aportado al programa.
El endowment destinado al programa es de 11.299.603 euros. Este curso ha aportado 425.123 euros del total de 3.692.523 que la Universidad ha destinado a becas.
Objetivo 2027: conseguir 15 millones de euros adicionales para dotar 75 Becas Perpetuas por un importe medio de 7.500 euros.