La Mancomunidad de la Comarca de Pamplona ha instalado este mes de abril dos nuevos hoteles para insectos en el Manantial de Arteta y en el recinto de los depósitos de Mendillorri. El objetivo: fomentar la biodiversidad, facilitar la observación de la fauna local y crear espacios sostenibles que ayuden a especies clave como las abejas solitarias, las mariquitas o las crisopas.
Estos hoteles no son una excentricidad, sino una respuesta directa al declive de los artrópodos que se está produciendo en las últimas décadas. Los refugios están diseñados para dar cobijo y protección a los insectos, ayudando a la polinización natural y al control biológico de plagas.
En el caso del Manantial de Arteta, se han instalado cuatro estructuras de madera tratada con tejado a dos aguas, situadas junto al centro de información y educación ambiental. En su interior, cada refugio contiene una combinación de materiales pensados para atraer a distintas especies. Se han colocado cañas huecas, troncos con orificios y ladrillos perforados que favorecen la presencia de abejas solitarias. También se han añadido piñas y lajas para mariquitas, y compartimentos de madera rellenos de paja con fisuras de diferentes tamaños que permiten el alojamiento de crisopas y mariposas.
En el caso del hotel de insectos de Mendillorri, situado cerca de la Casa de Aguas, la estructura tiene dos metros de longitud y 1,8 de altura. Su diseño está centrado en acoger principalmente a las abejas solitarias, por lo que se han empleado troncos procedentes de restos de poda, cañas huecas y ladrillos de termoarcilla con orificios de distintos diámetros.
Tanto en Arteta como en Mendillorri, junto a los hoteles se han colocado paneles informativos para que los visitantes puedan conocer mejor las características y beneficios de los insectos que habitan en estos refugios. La iniciativa busca además crear puntos de observación naturalísticos, acercando la biodiversidad a la ciudadanía y reforzando la imagen de la Comarca de Pamplona como destino turístico sostenible. La actuación tiene también una dimensión educativa, al destacar el papel esencial de estos pequeños animales en el equilibrio ecológico.
El proyecto ha contado con un presupuesto total de 9.956 euros más IVA, de los cuales 6.850 euros se han destinado a la construcción de los refugios y 3.096 euros a los paneles informativos. Ha sido financiado a través de una subvención enmarcada en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, mediante los fondos europeos NextGeneration EU, dentro del Plan de Sostenibilidad Turística en Destino Comarca Pamplona Rural.
Esta no es la primera vez que la Mancomunidad apuesta por este tipo de instalaciones. En 2022, se colocó el primer hotel de insectos en el meandro de Areatzea, en Huarte, un espacio que hasta 2020 fue utilizado como vertedero de escombros y que hoy se ha convertido en el primer sumidero de CO₂ de Navarra. Desde entonces, ese hotel ha servido para realizar visitas guiadas centradas en la abeja solitaria y su función como polinizadora clave del ecosistema.
Con esta red de hoteles para insectos, la Comarca de Pamplona refuerza su compromiso con la educación ambiental, la sostenibilidad y la protección de la biodiversidad local.
