La Cámara de Comptos ha destacado la "mejora en la situación económica" de la Administración Foral respecto a 2018 si bien ha insistido en la "alta temporalidad" de su personal. En este sentido, ha indicado que "la mitad de los empleados públicos son contratados", un porcentaje que ha considerado "excesivo y preocupante".
Así lo señala el órgano fiscalizador en su informe sobre las cuentas generales de Navarra de 2019, que ofrece una visión global sobre la situación económica de la Administración foral.
En concreto, el informe señala que el Gobierno de Navarra gastó el año pasado 4.396 millones, de los que 1.600 son transferencias corrientes; 1.400 corresponden a personal; y 670 a gastos corrientes en bienes y servicios.
Respecto al personal, el informe indica que el gasto ha aumentado un 12% respecto a 2018 debido al pago del grado al personal temporal con contrato administrativo y al que ocupa plazas en promoción; al incremento retributivo anual; y al pago de los meses de verano a los docentes interinos.
En su informe, la Cámara de Comptos vuelve a insistir en la "alta temporalidad" del personal de la Administración foral. De hecho, la mitad de los empleados públicos son contratados, porcentaje que la Cámara de Comptos considera "excesivo y preocupante".
SANIDAD, EL 42% DEL GASTO
Analizando el gasto desde el punto de vista de su función, sanidad es el capítulo más importante, con 1.870 millones de gasto, lo que supone el 42% del total; a Educación se destinan 700 millones, el 16% del gasto; y al Convenio Económico con el Estado 550 millones, el 12% del total.
El pago de la deuda pública supuso el año pasado algo más de 400 millones, el 9% del gasto. Por su parte, el gasto en inversiones se ha reducido "notablemente" en los últimos ejercicios. Así, el año pasado "sólo se invirtieron 135 millones, es decir, la mitad que en 2010".
En cuanto a los ingresos, sumaron 4.416 millones de los que 4.000 corresponden a impuestos directos e indirectos, con 2.000 millones cada uno. Los pasivos financieros suman algo más de 200 millones y las tasas y precios públicos unos 150 millones.
El informe señala que las cuentas de 2019 reflejan, en general, la imagen fiel del patrimonio, la situación financiera y los resultados económicos y presupuestarios. Se cita, sin embargo, alguna salvedad como la no aplicación total del Plan General Contable en los ingresos.
La opinión sobre legalidad también es favorable porque la gestión económico financiera de la Administración Foral cumple la normativa vigente. Se apunta como salvedad el gasto de unos 200 millones abonados por prestaciones con contratos cuya vigencia había finalizado.
"MEJORA" EN LOS INDICADORES ECONÓMICOS
Por otro lado, la Cámara de Comptos subraya en su informe la "mejora" en la situación económica de la Administración foral respecto a 2018.
En este sentido, el ejercicio acabó con un ahorro neto de 85 millones y remanente positivo de 140 millones, habiendo disminuido la deuda por debajo de los 3.000 millones. Al igual que en 2018, la deuda amortizada fue mayor que la concertada, rompiendo la tendencia de los años anteriores.
Además, la Administración foral negoció un plan para mejorar las condiciones de financiación de la deuda que permitió un ahorro de 38 millones el año pasado.
En todo caso, "existe un volumen de deuda considerable -2.961 millones- que hay que amortizar en los próximos años". La mitad de esa cifra debe amortizarse antes de 2025.
El informe también advierte de los efectos negativos de la pandemia de la Covid-19 tanto en los gastos como en los ingresos de 2020, que "previsiblemente romperán la buena evolución de los últimos ejercicios".
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