La crisis del coronavirus deja en España, hasta el momento, 3.386.785 trabajadores afectados por expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE), de los que 678.684 se sitúan en Cataluña y 566.307 en la Comunidad de Madrid, una cifra que en el caso de Navarra se sitúa en 49.757.
Según datos facilitados por el Ministerio de Trabajo y a fecha 30 de abril, de los 3.386.785 ERTE, la gran mayoría (3.074.462) son "por fuerza mayor", es decir, empresas que no pueden desarrollar su actividad "por razones extraordinarias y urgentes que sean consecuencia directa del Covid-19".
A Cataluña y la Comunidad de Madrid le sigue Andalucía con 477.392 trabajadores afectados por ERTE, la Comunidad Valenciana (349.634), Canarias (231.537), Galicia (165.038), País Vasco (152.872), Castilla y León (145.505) y Baleares (141.614).
Con menor número de afectados por esta medida se encuentran Castilla-La Mancha (99.342), Aragón (86.986), Murcia (79.686), Asturias (59.221), Navarra (49.757), Extremadura (39.889), Cantabria (35.547) y La Rioja (21.618).
Las ciudades de Ceuta y Melilla contabilizan 2.787 y 3.369 trabajadores afectados, respectivamente.
Según el Ministerio de Trabajo, estos ERTE suponen el 24,25 por ciento de los afiliados en el Régimen General.
Los sectores con más perjudicados por esta medida son los relacionados con servicios de comidas y bebidas (726.137), comercio al por menor (448.243), comercio al por mayor (210.959) y servicios de alojamiento (206.379).
LOS SINDICATOS PIDEN MÁS MEDIDAS
UGT considera a la vista del paro registrado en abril que es "imprescindible" extender la vigencia de los ERTE por fuerza mayor, "principal instrumento" frente al desempleo, y contar con un plan de reconstrucción económica y social en el marco del Diálogo Social.
El sindicato alerta de un aumento de la brecha de género entre las personas en paro por la incidencia de éste en el sector servicios, que acapara el 79,4% del total de nuevas personas desempleadas y el 69,3% de todas las paradas de Navarra.
Unos datos, dice, que responden "a la auténtica sangría que la crisis sanitaria está causando en sectores como la hostelería, el comercio y otros servicios privados", y que "deben situarse entre las prioridades del plan de reconstrucción que hay que poner en marcha".
En consonancia con el aumento del paro, añade UGT, se sigue produciendo "una gran caída de la contratación" y entre los contratos realizados, prácticamente la mitad que en marzo, que ya registró una "fuerte" caída, el 94% fueron temporales.
En esta situación, la UGT reclama la prolongación de los ERTES, más allá de la vigencia del estado de alarma, de forma que se evite la destrucción de empleo y se posibilite la paulatina reincorporación a sus puestos de trabajo de las personas que los tienen suspendido conforme se vaya recuperando la actividad.
Junto a esta medida agrega que hay que "extender la red de protección social y completarla de inmediato con un Ingreso Mínimo Vital de emergencia, que no se puede demorar por más tiempo".
Finalmente insta al Gobierno de Navarra a "impulsar la negociación urgente de un plan de reconstrucción económica y social, buscando el máximo consenso político en el Parlamento y el acuerdo con las organizaciones empresariales y sindicales en el Consejo de Diálogo Social".
Por su parte, CCOO ha pedido al Gobierno, conocidos los datos del paro registrado en abril, que ha crecido el 8% en España y el 8,2% en Navarra, que atienda a las personas que lo han perdido, en especial a las más vulnerables, y que se vite la destrucción de más puestos de trabajo.
Con este objetivo CCOO propone prorrogar los ERTEs el tiempo que sea preciso para sostener el tejido productivo y mantener el empleo; cubrir las necesidades de quienes carecen de cualquier tipo de prestación, por lo que ve urgente el Ingreso Mínimo Vital; y acordar con los agentes sociales un Plan de reactivación económica que no deje a nadie al margen.
El sindicato destaca que abril no supera los datos de subida del paro de marzo pese a ser el primer mes completo afectado por la crisis del coronavirus, pero aun así registra una subida "sin precedentes, y ofrece unos indicadores de paro registrado y de afiliación a la Seguridad Social "excepcionalmente negativos en un mes en el que tradicionalmente baja el desempleo".
Y añade que desde el inicio del estado de alarama las oficinas de empleo han registrado 6.467 personas desempleadas más sin contar con las más de 68.000 incluidas en los 7.000 ERTEs contabilizados hasta ahora, por lo que los datos serían mucho más negativos de no haberse puesto en marcha este mecanismo.
Destaca además que la subida del paro ha afectado sobre todo a personas con contrato temporal y a todos los sectores salvo la Agricultura, al que más al de los servicios que suma 2.444 desempleados más que en marzo y 5.200 desde que comenzó la crisis.
Por otra parte CCOO indica que en abril se firmaron 13.057 contratos frente a los 25.208 del mes anterior, y el 93% de estos contratos fueron temporales.
Para la Cámara de Comercio, esta cifra se acerca a los registros de paro en Navarra en 2010 tras el inicio de la crisis financiera y su efecto en el conjunto de la economía.
En lo que llevamos de año, y teniendo en cuenta el efecto de los meses de marzo y abril, el paro ha subido en Navarra en 6.570 personas, un deterioro del 19%.
Por eso, desde la institución, creen necesario articular medidas lo antes posible para compensar, en la medida de lo
posible, la caída de actividad y empleo, a medida que se alivien las medidas de confinamiento y sobre todo con la antelación suficiente para evitar la incertidumbre y los cuellos de botella en el suministro de ciertos productos como ya ocurrió desde que comenzó esta crisis.
