La prestigiosa revista científica 'Scientific Reports', del grupo 'Nature', ha publicado hace unos días los resultados del estudio serológico de la Cendea de Cizur realizado en junio de 2020, uno de los primeros en toda España durante la pandemia. En el estudio participaron un total de 728 habitantes de la Cendea de Cizur lo que supuso un 25% de los 2800 vecinos censados en la Cendea.
De entre ellos, se detectaron anticuerpos contra el virus SARS-CoV-2, causante del COVID-19, en un 7,7% (lo que equivale a 56 participantes). Por grupo de edad, la seroprevalencia estimada más baja se observó en niños de 0 a 10 años de edad situada en 2,1% y la más alta en el grupo de edad de 11 a 20 años situada en un 11,3%; así que los niños más mayores y adolescentes entre 11 y 20 años tenían entonces casi seis veces más probabilidades de tener anticuerpos que los niños pequeños de 0 a 10 años.
De los 56 participantes con anticuerpos detectables, 28,6% habían sido asintomáticos. En el resto, los síntomas más comunes fueron el dolor de cabeza, dolor de garganta, tos y secreción nasal; presentes en 3 de cada 10. Un 33,6% declararon haber tenido un contacto estrecho con una persona con COVID19 y 10 participantes declararon haber sido diagnosticados. Además, el estudio ha encontrado asociaciones entre la edad y la probabilidad de tener anticuerpos del tipo IgA e IgG. Es decir, que de entre aquellos que presentaban anticuerpos específicos contra el virus, a mayor edad, mayor era la probabilidad que estos anticuerpos fuesen del isotipo IgA e IgG. Por otro lado, también se encontró una asociación entre ser varón y tener anticuerpos del tipo IgG.
Los participantes del estudio también respondieron a un cuestionario del que se arroja información relevante respecto a la primera ola (desde mediados de febrero a mediados de junio del 2020). Un 77% consideraba haber estado en un lugar con aglomeraciones desde mediados de febrero – cuando se considera que el virus ya podía estar en circulación, dado que había casos confirmados en sendos puntos de España.
Un 43% de los participantes mayores de 20 años declararon haber acudido a un centro de salud durante la primera ola, un 7% por síntomas compatibles con COVID-19, un 23% acompañando a alguien y un 15% por trabajo. Unos de cada dos acudieron a un supermercado, y la proporción fue mayor en hombres (un 62,9% de entre ellos fueron) que en mujeres (un 47,9%). Cuatro de cada diez declaraban limpiar la compra al llegar a casa. Con lo que respecta al impacto socioeconómico; cuatro participantes perdieron su trabajo por un motivo directamente relacionado con la pandemia. Además, un 23% declararon haberse visto afectados económicamente, siendo los que menos aquellos con un grado universitario o superior. No se vieron diferencias significativas de género.
El Dr. Carlos Chaccour que lideró el estudio agradeció “especialmente la participación de las familias de la Cendea, que pocas semanas tras el fin del confinamiento, recibieron amablemente a los voluntarios que realizaban las encuestas y toma de sangre capilar.” Por su parte Rafael Ansó, alcalde de la Cendea de Cizur, destacó que “en esos tiempos difíciles desde el ayuntamiento decidimos ayudar a nuestros vecinos con medidas como el reparto de mascarillas cuando no había existencias o la realización de este estudio serológico” además añadió que “fueron tiempos difíciles para todos, pero desde nuestro ayuntamiento trabajamos con ahínco para ayudar y estar cerca de nuestros vecinos”.
