La sección de danzas de Oberena ha celebrado este 3 de diciembre, festividad de San Francisco Javier, su gran día con una exhibición en el pabellón polideportivo del club manguiverde a las 12 horas.
Han participado grandes y pequeños con diferentes repertorios en el día del patrón de Navarra, pero no se ha bailado al aire libre ni se ha hecho el recorrido por las calles cercanas al club en el barrio de la Milagrosa.
El año pasado, por culpa de la pandemia, se organizó de forma inusual: ocho dantzaris y cinco músicos del grupo principal se encargaron de ofrecer una soka-dantza sin público que se retransmitió por internet.
Este año, como en ocasiones anteriores, todas las generaciones del grupo se han reunido de nuevo. El repertorio ha sido el siguiente: Ezpata dantza de Xemein, matelota, gorularien arkudantza eta domingillo, ingurutxo de Iribas, zazpi jauziak, la jota de la Pilindros y las danzas de Eltziego.
Las puertas del polideportivo de Oberena se han abierto a las 11:30 horas y se han cerrado a las 11:55 horas. En todo momento ha sido obligatorio el uso de mascarilla en el interior del pabellón.
A continuación, los dantzaris txikis han disfrutado de un aperitivo y los adultos de una comida en el renovado bar restaurante de Oberena. Para quedarse a la comida ha sido necesario llevar el certificado o pasaporte Covid-19.
Este año el grupo de dantzas de Oberena ha cumplido 80 años, pero los eventos previstos se han tenido que suspender por la pandemia.
