Después de la zona azul, la zona naranja, la zona verde y la roja, llega ahora a Navarra la zona rosa, una nueva forma de aparcamiento limitado pero que, en este caso, no tiene coste para el usuario, aunque sí se puede llevar una multa si se incumple el tiempo.
La Zona Rosa de estacionamiento ha comenzado este lunes, 1 de septiembre, en Sarriguren, dentro del Valle de Egüés. Se trata de un sistema regulado pero gratuito, con señalización en color rosa, cuyo objetivo es mejorar la rotación de vehículos en las zonas más saturadas y facilitar tanto el acceso a los servicios públicos como el impulso al comercio local.
El nuevo modelo de estacionamiento afecta, en primer lugar, al entorno del Centro de Salud, la Escuela Infantil Tangorri y las inmediaciones del Ayuntamiento. En estas áreas, ubicadas en la calle Garajonay y la avenida de España, se permite aparcar un máximo de 90 minutos entre las 7:30 y las 14:30 horas, de lunes a viernes. Por las tardes, noches, fines de semana y festivos no existe restricción alguna.
La medida se amplía también a la avenida Reino de Navarra y la avenida Erripagaña, donde se han delimitado nueve plazas reguladas pensadas para dinamizar las compras en el comercio local. En estas calles, el estacionamiento se limita a 30 minutos en horario de mañana (10:00-14:00) y tarde (17:00-20:00), de lunes a viernes. Los sábados, la limitación se aplica únicamente por la mañana, de 9:00 a 14:00 horas, quedando libres el resto de días y franjas.
El funcionamiento es sencillo: basta con registrar el vehículo en la aplicación Telpark y obtener un ticket virtual para marcar el inicio del estacionamiento en la zona concreta donde se ha aparcado. No es necesario ningún permiso adicional. Durante este primer mes, además, el Ayuntamiento no impondrá sanciones para facilitar que la ciudadanía se adapte, aunque la Policía Municipal supervisará la aplicación de la norma.
La puesta en marcha de esta iniciativa fue aprobada en la última modificación de la Ordenanza Municipal de Tráfico, y responde a la demanda de soluciones para los problemas de aparcamiento que se generan en horarios punta, especialmente en días laborables por la mañana. El Consistorio confía en que esta fórmula permita equilibrar las necesidades de los vecinos, los servicios públicos y el pequeño comercio de la zona.