A pesar de que el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska asegurara la semana pasada en Pamplona que la inseguridad no ha crecido en Navarra, lo cierto es que no hay día en el que no se produzcan hechos que asustan a la población, especialmente a los vecinos del casco viejo de Pamplona.
En esta ocasión, la Policía Municipal de Pamplona ha detenido a un hombre de 38 años de edad acusado de un delito de lesiones después de que protagonizara una pelea en la calle Mayo del Casco Antiguo de la ciudad.
Los agentes llegaron al lugar en plena reyerta, de manera que tuvieron que emplearse en separarlos. Uno de los hombres estaba herido y sangraba abundantemente por la cabeza. Aseguraba a los agentes que le había golpeado con una botella de vidrio, aunque no se encontró en las inmediaciones ninguna botella ni restos de cristales, por lo que entendieron que debió haberle golpeado con algún otro objeto contundente.
El herido fue trasladado en ambulancia al Hospital Universitario de Navarra donde precisó atención médica y sutura en la herida sangrante de la cabeza.
La sorpresa de los agentes fue cuando, al identificar al agresor, comprobaron que sobre él pesaban dos órdenes de detención y personación en un juzgado de Zaragoza y otra de detención e ingreso en prisión dictada por el Juzgado de Instrucción número 4 de Pamplona.
El detenido pasará a disposición judicial en las próximas horas quien, y con toda probabilidad, será enviado al centro penitenciario.
