El fuego del pasado verano fue el más grave de las tres últimas décadas en Navarra y calcinó 3.538 hectáreas de la Zona Media.
La alerta por el peligro de incendios sigue latente en Navarra. A las elevadas temperaturas, que en algunas zonas alcanzan los 37 grados, se suman también la posibilidad de desatarse fuegos debido a malas prácticas del ser humano. Precisamente Policía Foral ha vuelto a alertar de estos últimos peligros a raíz de un incendio que se ha producido este martes en la A-15, a la altura de Lekunberri.
El aviso por el suceso, según fuentes de Emergencias del Gobierno foral, se ha recibido a las 15:15 horas y hasta la zona han acudido tanto la Brigada Rápida de Intervención Forestal (BRIF), como un equipo de Bomberos de Cordovilla.
A pesar de la reducida extensión de matorral quemado, hay que tener en cuenta el riesgo potencial de estos fuegos. Por fortuna, han podido ser sofocado rápidamente y no ha avanzado más allá de 20 metros. La BRIF se ha retirado a continuación y los bomberos han continuado la tarea remojando el perímetro pro precaución. Actualmente se investigan las causas.
El cuerpo policial navarro ha recordado el grave incendio del pasado verano que calcinó 3.538 hectáreas y afectó a los términos de Artajona, Añorbe, Barásoain, Garínoain, Pueyo y Tafalla. La causa de tal brutal suceso fue una colilla de cigarro arrojada desde un vehículo. Fue el de mayor extensión registrado en Navarra en las últimas tres décadas.
Cuneta y autopista... blanca y en botella la causa ¿no fue suficiente el incendio de Tafalla 2016?#responsabilidad#educación#prudencia https://t.co/2tnKaAOB8R
— Policía Foral (@policiaforal_na) 20 de junio de 2017
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