Efectivos de la Guardia Civil han investigado a un hombre de 33 años, residente en Lodosa (Navarra), por un hurto de fruta cometido en una zona agrícola de La Rioja. El individuo, con numerosos antecedentes por robos y hurtos en explotaciones rurales, fue interceptado con 140 kilos de nectarinas en el maletero de su coche.
El hallazgo se produjo durante uno de los dispositivos de vigilancia rural que el Instituto Armado desarrolla para prevenir delitos en explotaciones agrícolas y ganaderas. Los agentes del Puesto de Aldeanueva de Ebro observaron un vehículo Seat que levantó sus sospechas y procedieron a su identificación. Tras consultar las bases de datos, comprobaron que el conductor acumulaba antecedentes por robos de fruta en la zona.
En el registro del vehículo, los agentes encontraron cajas llenas de nectarinas. El hombre ofreció varias versiones contradictorias sobre su procedencia: primero dijo que las había recogido del suelo en una finca cercana, y después aseguró que las había comprado por 20 euros a un compatriota para revenderlas en una frutería de Logroño.
Ante la falta de pruebas sobre la procedencia legal del producto, la Guardia Civil intervino la mercancía, que pesaba 140 kilos. Dado que no se pudo identificar la finca de origen y se trataba de fruta perecedera, los agentes entregaron las nectarinas a una asociación de ayuda a personas necesitadas.
El varón ha sido puesto a disposición judicial por un delito leve de hurto en el medio rural.
