Agentes de la Policía Nacional han desarticulado una organización criminal dedicada al tráfico internacional de estupefacientes en Países Bajos y España, que elaboraba y distribuía diversas drogas de origen sintético, así como extraía pasta base de coca o clorhidrato de cocaína.
La operación, que se ha llevado a cabo en varias fases en colaboración con la Policía Nacional de Róterdam en Países Bajos, ha culminado con 25 detenciones (24 en España y una en Países Bajos), ingresando hasta el momento seis de los arrestados en prisión.
Además, en los 25 registros practicados se han intervenido en España 67 kg de sulfato de anfetamina (speed), 33.000 € en efectivo, 2 vehículos de alta gama y 11,8 kilogramos de sustancia de corte.
En Países Bajos fueron incautados 7.500 euros en efectivo, 2,7 kg de metanfetamina (MDMA) así como 0,5 litros en líquido, 11.023 litros de productos químicos precursores para la extracción y elaboración de estupefacientes con una capacidad estimada de producción de hasta seis toneladas de cocaína.
La investigación se inició a principios de 2021, cuando los agentes recibieron información sobre el posible tráfico de cocaína a pequeña escala en un establecimiento hostelero de Pamplona. Las vigilancias permitieron comprobar cómo el trasiego de personas con el fin de adquirir droga era frecuente, y que la droga de mayor pureza y calidad procedía de otro grupo de origen peruano.
Tras poner el objetivo sobre este nuevo grupo, se pudo llegar hasta los líderes de una organización criminal de mayor calado con conexiones, por un lado, con Países Bajos y varios países de Sudamérica, como Colombia o Paraguay, y por otro con Perú, desde donde trataban de importar la cocaína impregnada en pequeños envíos.
El líder de la organización, afincado en Zaragoza, era además el químico. Pretendía abrir el abanico de negocio, importando pasta base de coca para posteriormente sintetizar el producto final, clorhidrato de cocaína. Para ello contaba con los amplios conocimientos del líder de la trama peruana detenida en Pamplona, que años atrás ya había sido detenido al tratar de introducir droga por el aeropuerto de Madrid Barajas.
La organización tenía el apoyo logístico de un grupo criminal holandés que importaba tanto los precursores fundamentales para la elaboración de todo tipo de drogas sintéticas, como cargamentos de pasta de coca. Estos productos eran introducidos principalmente a través del puerto de Róterdam.
Fruto de la cooperación policial internacional, mediante una Orden Europea de Investigación, se logró desmantelar en Países Bajos un laboratorio en el que se incautaron productos químicos suficientes como para sintetizar hasta seis toneladas de cocaína, siendo uno de los laboratorios más importantes desmantelados en dicho país.
Dicho laboratorio, además, servía para la elaboración de otras sustancias halladas en el lugar, como metanfetamina, droga que en la actualidad preocupa a las autoridades holandesas, considerándola un riesgo grave para la seguridad nacional dada las organizaciones criminales que están controlando su distribución. En Zaragoza, se desmanteló igualmente un laboratorio clandestino, oculto en el almacén de un bar de reciente apertura, en el que se intervinieron 66 kilogramos de sulfato de anfetamina (speed) de gran pureza.
Las detenciones se han realizado en varias fases, en operativos establecidos en Pamplona, Zaragoza y Róterdam, practicando 25 registros en dichas localidades y en el municipio madrileño de Getafe. De las 25 personas detenidas, han ingresado hasta el momento seis de ellas en prisión.
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