La Policía Foral ha intervenido este fin de semana en 35 accidentes de tráfico ocurridos en las carreteras navarras, con el trágico balance de una persona fallecida, una herida grave y cinco heridos leves.
Además, los agentes han abierto diligencias a 18 personas por la comisión de distintos delitos, tanto en materia de seguridad vial como de seguridad ciudadana.
En el ámbito de la seguridad vial, siete conductores han sido citados para juicio rápido por delitos contra la seguridad del tráfico. Dos de ellos fueron interceptados por alcoholemias penales en Tudela (1,03 mg/l en un control preventivo en la calle Tarazona) y en Cárcar (0,97 mg/l, tras un aviso por conducción zigzagueante en la NA-134). En Ribaforada y San Adrián, otros dos conductores circulaban sin puntos en el carné.
En Caparroso, el conductor de una moto se dio a la fuga y fue localizado sin carné y con resultado positivo en drogas. En Fontellas, se investiga a un conductor por negarse a someterse a las pruebas de alcoholemia y conducir sin carné, que tenía retirado hasta junio. Finalmente, en Murchante, un menor de 14 años, de origen marroquí, resultó herido leve tras salirse de la vía en la Cuesta Moneo con el turismo de sus padres. Fue imputado por conducir sin permiso.
Los 35 accidentes registrados durante el fin de semana se distribuyeron en 16 el viernes, 9 el sábado y 10 el domingo. Entre ellos, destaca el ocurrido en Lodosa, con un fallecido y una herida grave. Además, se atendieron siniestros con heridos leves en Legarda, Imotz, Baztan, Ablitas y Falces, y el resto solo causaron daños materiales. Las vías con más siniestros fueron la PA-30, con tres accidentes, y la N-121, con dos.
En cuanto a la seguridad ciudadana, se han registrado 11 detenciones. Cinco de ellas están relacionadas con delitos cometidos contra mujeres. Dos hombres fueron detenidos en Lekunberri y Pamplona por agredir a sus parejas, y las víctimas solicitaron órdenes de alejamiento. Otros dos fueron arrestados en Tudela y Leitza por quebrantar medidas judiciales de alejamiento.
El quinto fue detenido en Ansoáin, acusado de un intento de agresión sexual a una menor. Según la denuncia presentada por la madre, el sospechoso llevaba días acosando a niñas a la entrada y salida de un colegio. Fue detenido tras establecerse un dispositivo de vigilancia que permitió interceptarlo cuando intentaba contactar con una alumna.
Tres personas más fueron detenidas por requisitorias judiciales: dos en Berriozar, una de ellas con orden de ingreso en prisión y otra reclamada por un juzgado de Pamplona, y una tercera en Tudela, con un código rojo de búsqueda activado por un juzgado de la capital ribera.
En Pamplona, un hombre, de origen marroquí, fue arrestado por un robo con violencia y daños leves. La víctima denunció el robo de su teléfono móvil tras sufrir una agresión en las inmediaciones de un salón de juegos del barrio de La Milagrosa, y solicitó medidas de alejamiento respecto al autor.
Por último, en Estella-Lizarra, dos mujeres fueron detenidas por desobediencia y resistencia a la autoridad. Los hechos ocurrieron tras una intervención policial en una pelea entre mujeres. Al ser notificadas de que serían denunciadas por desórdenes, ambas reaccionaron insultando y resistiéndose a las agentes intervinientes.