La Policía Municipal de Pamplona ha realizado un total de 323 intervenciones durante el pasado fin de semana, en las que ha sido necesaria la presencia policial para garantizar la seguridad y el orden en la ciudad.
Entre las actuaciones más destacadas, 69 estuvieron relacionadas con problemas de convivencia, que gracias a la mediación de los agentes pudieron resolverse sin mayores complicaciones.
Además, se llevaron a cabo 32 intervenciones de carácter asistencial, muchas de ellas para ayudar a personas que habían sufrido intoxicaciones etílicas. Por otro lado, las molestias provocadas por ruidos y fiestas en domicilios particulares generaron 22 actuaciones.
En la Oficina de Atención al Ciudadano, se recibieron 33 denuncias penales, mientras que se llevaron a cabo 7 detenciones por diferentes delitos. Entre ellas se encuentra la detención de un hombre de 56 años por malos tratos en el ámbito familiar, otro de 39 años arrestado por violencia de género en la calle Urdánoz, y una mujer de 45 años detenida por atentado y resistencia a la autoridad en la plaza del Castillo durante la madrugada del sábado al domingo.
También se arrestó a un varón sobre el que pesaba una orden de búsqueda, detención y presentación, mientras que otro fue detenido por una orden pendiente de búsqueda, detención e ingreso en prisión.
A esto se suma el arresto de una mujer de 24 años en la Travesía Acella por robo con violencia, así como la detención de un individuo que fue arrestado en dos ocasiones durante el fin de semana por quebrantamiento de una orden de alejamiento.
Con este balance, la Policía Municipal pone en valor su trabajo para mantener la seguridad ciudadana, respondiendo de forma efectiva a las diferentes demandas de los vecinos de Pamplona.
