Cerca de las 8:00 de la mañana de este miércoles, el tejado del edificio de la Policía Municipal de Pamplona todavía humeaba abundantemente y se veía alguna llama aislada. Ha pasado la noche en llamas desde que este martes, a las 14:00 se declarara el incendio y se desalojara el edificio.
Ha estado ardiendo toda la noche por decisión de los bomberos que, una vez controlado el fuego, estimaron que lo mejor era dejar que se consumiera por sí sólo. La cubierta del edificio es de hormigón y cemento, de modo que no había riesgo de que se propagara hacia abajo, de ahí la decisión.
Ese es el motivo por el que a esta hora permanecen cortadas las calles que perimetran el edificio, es decir, la calle Monasterio de Irache en el tramo comprendido la calle San Roque y la Cuesta de la Reina y la calle Orcoyen desde el cruce con la calle Monasterio de Fitero.
Según confirman desde Policía Municipal de Pamplona, y a falta de los informes de los Bomberos sobre las causas concretas y exactas del incendio, apunta a que el fuego se ha originado en alguna de las placas solares que se instalaron en el tejado. Al parecer, podría haber sufrido algún tipo de cortocircuito y alguna chispa podría haber prendido los soportes de madera de las placas solares.
Tras perimetrar el fuego para evitar su propagación a los edificios colindantes, los bomberos han decidido dejar que el fuego se consumiera tras quemar la tela asfáltica que protegía el tejado al considerar que el cemento y el hormigón del tejado iban a impedir que el fuego se propagar hacia abajo.
A primera hora de este miércoles el turno de mañana ha entrado a trabajar con normalidad. Los agentes se han cambiado en el interior del edificio, como es habitual y han salido a las calles. Lo han podido hacer sin problema puesto que ni el sótano, ni la planta baja, han tenido afección alguna.
Únicamente los funcionarios de la Policía Municipal que trabajan en la primera planta del edificio no están a estas horas en sus puestos de trabajo, pero sí trabajando. Los agentes que ocupan los despachos de esa primera planta están este miércoles haciendo el servicio en la calle, como tantos agentes más.
Entretanto, se espera a que los bomberos den definitivamente por extinguido el incendio, al tiempo que hacen mediciones de los niveles de humo para dar luz verde al regreso a esa primera planta.
Un humo que desde primera hora de la tarde se ha ido expandiendo por varios barrios de la ciudad y que obligó a miles de vecinos a cerrar las ventanas e incluso a usar mascarillas en casa, especialmente en viviendas de la zona de San Juan en el que se ubican las dependencias policiales.
Desde el Ayuntamiento de Pamplona señalan que ya se han puesto en contacto con las compañías de seguros para iniciar a la mayor brevedad posible el papeleo y comenzar con las reparaciones que sean necesarias para que el edificio pueda volver a la normalidad.
