Tras 27 años de actividad, la tienda de textil hogar Devoré, ubicada en la calle Emilio Arrieta de Pamplona, cerrará sus puertas de forma definitiva. La tienda, que se encuentra en un emblemático edificio construido en 1928 y que muchos conocen por las dos estatuas que 'sujetan' una de las estructuras del edificio.
La historia de la tienda es extensa, antes de ser Devoré, el local albergaba a Almacenes Ferraz, una tienda icónica que abrió en 1978. Veinte años después, los antiguos trabajadores de Ferraz fundaron Devoré, manteniendo la esencia de lo que siempre fue un referente para los pamploneses. "Aunque sea Devoré, aquí los clientes le siguen llamando Ferraz", añade Javier Borruel, socio de Devoré junto con Alfonso Armendáriz.
La crisis económica que atraviesa el pequeño comercio local junto con los elevados impuestos y costes de las facturas, han sido los motivos que han forzado el cierre. “Es lo que tiene el pequeño comercio, hemos intentado luchar, pero entre impuestos y todo ha sido imposible". Este es solo un ejemplo más de los desafíos a los que se enfrenta ahora el comercio local.
Por el momento, Devoré no tiene una fecha de cierre exacta. El objetivo es liquidar todo el stock, vendiendo los productos a mitad de precio, lo que ha generado una gran afluencia de clientes en los últimos días. “No vamos a cerrar hasta que liquidemos todo. Está todo a mitad de precio y llevamos dos días de locura", señala Borruel.
Este cierre supone el final de una etapa para el comercio textil en el centro de Pamplona, atrás dejan un legado de más de cuatro décadas, primero como Ferraz y luego como Devoré. "Es una pena por los clientes y la trayectoria de la tienda, hemos luchado lo que hemos podido. Estos días serán el último contacto con los clientes de toda la vida y el que quiera pasarse estaremos muy agradecidos", comenta Borruel.
