PAMPLONA
Pamplona anuncia el derribo de varios edificios en el casco viejo para crear una plaza pública
Los trabajos comenzarán después de verano y tendrán una duración aproximada de cuatro meses.

El Ayuntamiento de Pamplona prevé iniciar en septiembre de 2025 los derribos del edificio Oscus, situado en el corazón de Navarrería, con el objetivo de liberar el espacio interior de la manzana para transformarlo en una nueva plaza pública. La Junta de Gobierno Local aprobó el pasado 4 de julio la licitación del contrato de obras, que cuenta con un presupuesto de 565.956,71 euros.
Los trabajos se enmarcan en el proyecto titulado ‘Derribo de las edificaciones que ocupan el interior de la manzana 111 del Casco Antiguo de Pamplona, Edificio OSCUS’, redactado por el estudio OM ARQ SLP, con los arquitectos Óscar Mongay Jiménez y María Teresa Mariezcurrena Echeverría. La intervención se desarrollará en la parcela catastral 129 del polígono 1, correspondiente al número 31 de la calle Navarrería, y tendrá una duración estimada de cuatro meses.
La actuación contempla dos objetivos principales: por un lado, la retirada del amianto que todavía permanece en parte de las edificaciones —especialmente en la cubierta, realizada con paneles de fibrocemento—; y por otro, la creación de un nuevo espacio abierto a la ciudadanía, integrado dentro de la Zona de Intervención Preferente 1 (ZIP1).
Construido en los años 60, el edificio conocido como Oscus ha tenido diversos usos sociales y culturales a lo largo de su historia. Desde 2009, cuando estas funciones fueron trasladadas al Palacio del Condestable, el inmueble ha permanecido en desuso, salvo para empleos puntuales como comedor social municipal. En la actualidad, presenta un grado medio-alto de deterioro.
Debido a esta situación y a la presencia de materiales peligrosos, el Consistorio ha optado por su demolición completa, incluyendo la eliminación del amianto. Además, se plantea como objetivo urbanístico la creación de una futura plaza interior, con acceso desde la calle Navarrería, que acoja zonas de descanso, juegos infantiles u otros usos vecinales.
Las obras incluirán la demolición total de las edificaciones interiores, así como la excavación de la cimentación y la consolidación de los muros medianiles de las parcelas colindantes, hasta una altura aproximada de 2,50 metros.
Uno de los trabajos más destacados será el derribo del muro colindante con el patio del INAP y la construcción de un nuevo cierre de parcela, formado por un murete de bloque de hormigón prefabricado y un vallado del mismo alto. También se procederá a acondicionar elementos puntuales existentes en parcelas adyacentes.
Antes del inicio de las tareas de derribo, el Ayuntamiento coordinará con los propietarios de los inmuebles colindantes las posibles afecciones derivadas de las obras, especialmente con los responsables del número 31 de la calle Navarrería, ubicado en la misma parcela.
La intervención se enmarca en la campaña de retirada de amianto en edificios municipales, en cumplimiento de la Ley 7/2022, de 8 de abril, y deberá ajustarse a toda la normativa específica en materia de seguridad y medio ambiente.