PAMPLONA
Pamplona creará una nueva reserva fluvial antes de final de año en un entorno actualmente degradado
Los trabajos, con un presupuesto de un millón de euros, cubrirán los restos de un antiguo molino.

La Junta de Gobierno Local de Pamplona ha aprobado este lunes la adjudicación de las obras para crear una reserva fluvial en el entorno del molino de Ilundáin, una actuación que incluye la renaturalización del espacio, la consolidación de los restos históricos y la recuperación del canal de abastecimiento.
Los trabajos serán ejecutados por Lacunza Hermanos SL por 1.047.418,11 euros, un 7,5% menos del precio de licitación, y tienen un plazo de ejecución de siete meses, por lo que podrían finalizar a finales de 2025.
Esta actuación se enmarca en el proyecto RUNA 2025, financiado por los fondos Next Generation EU y dotado con 2,7 millones de euros a través de la Fundación Biodiversidad del MITECO, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. El objetivo es doble: recuperar una superficie inundable actualmente degradada y proteger los restos históricos del molino, que datan del siglo XVI.
Las obras afectarán a 24.078 m² en el entorno del meandro de Berichitos, limitando con el río Arga, Barañáin y la calle Miluze. La actuación contempla devolver el terreno a su cota original eliminando escolleras y rellenos, reforestando con especies autóctonas y mejorando la biodiversidad mediante la instalación de cajas nido y refugios de fauna.
Además, se restaurarán los restos del molino bajo la supervisión de la Institución Príncipe de Viana, cubriéndolos con una nueva estructura de madera y cinc para garantizar su preservación. También se actuará en el canal de abastecimiento, limpiando su fondo y reparando los muros de piedra para recuperar el flujo natural del agua.
La nueva reserva fluvial incluirá senderos perimetrales, mobiliario ecológico, señalética y zonas de descanso, promoviendo así el uso ciudadano y la educación ambiental. En el paso bajo el puente, además, se limpiarán grafitis y se mejorará el entorno con vallas de madera.
El proyecto RUNA 2025 busca consolidar una red de infraestructuras verdes y azules en la ciudad, conectando los ríos Arga, Sadar y Elorz como ejes naturales para favorecer la biodiversidad, mejorar la resiliencia climática y promover una ciudad más sostenible. Incluye, entre otras acciones, la renaturalización de patios escolares y la eliminación de azudes en el río Elorz.
Con este tipo de intervenciones, Pamplona avanza hacia un modelo de ciudad más integrada con su entorno natural y comprometida con la sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente.