La presidenta de Navarra, María Chivite, y el alcalde de Pamplona, Joseba Asirón, han mantenido este martes una reunión en la que han analizado acciones conjuntas para impulsar nuevas viviendas en la capital navarra.
La reunión se produce sólo tres semanas después de que Asirón haya tomada posesión como alcalde de Pamplona, cuando con Ibarrola se negó a reunirse en todo momento.
Así lo ha puesto de manifiesto la propia Ibarrola, quien ha asegurado que "desde el mismo agosto, en cuanto Chivite fue presidenta, solicité estar con ella, una reunión institucional a la que se negó y jamás me pude reunir con María Chivite siendo alcaldesa de la capital de Navarra".
Ibarrola ha asegurado que trató de propiciar dicho encuentro en reiteradas ocasiones, pero que desde el gabinete de la presidenta se le negó en todo momento. "No podía reunirse conmigo simplemente por lo mismo que han hecho durante todos estos meses: porque tenían una hoja de ruta perfectamente definida y tenían que frenar, bloquear y tratar de hacer un relato inventado y falso que justificara algo que no han podido justificar", ha criticado.
“Yo lo intenté en varias ocasiones desde que fue nombrada, y no fue posible. Me negó una cita que veo que ahora tiene con quien era su candidato a la alcaldía, Joseba Asirón”, ha manifestado.
Chivite y Asirón, según explica el Gobierno de Navarra en una nota, han hablado de los planes sectoriales de incidencia supramunicipal (PSIS) de Beloso, Echavacoiz y el Campus de la Universidad Pública de Navarra en Arrosadía, que conllevarán la construcción de viviendas libres y protegidas y otros desarrollos urbanísticos, como la nueva estación del Tren de Altas Prestaciones (TAP). Asimismo, han evaluado los esfuerzos conjuntos para afrontar el problema del sinhogarismo.
