• viernes, 29 de marzo de 2024
  • Actualizado 13:38
 
 

MÚSICA

El Orfeón Pamplonés emociona en el cierre de la Quincena Musical Donostiarra

El Orfeón Pamplonés.
El Orfeón Pamplonés.

La 77 edición de la Quincena Musical de San Sebastián se cerraba este miércoles con el 'Te Deum' de Berlioz y casi 500 músicos sobre el escenario entre cantantes (los dos orfeones, Pamplonés y Donostiarra, y la Escolanía y Coro Joven de Easo) y músicos (las orquestas de Bilbao y Euskadi), además del tenor Christian Elsner y el organista Thomas Ospital, todos ellos dirigidos por Victor Pablo Pérez, director de la Orquesta y Coro de la Comunidad de Madrid (ORCAM). 

En un concierto que contó entre el público con la presencia del lehendakari Iñigo Urkullu, el diputado general de Guipúzcoa, Markel Olano, y el Alcalde de San Sebastián, Eneko Goia, entre otras muchas autoridades, y que mostraba la impactante presencia de todos los intérpretes llenando un escenario que hubo de ampliarse anulando 150 localidades de público.

En un auditorio Kursaal lleno (las entradas para este concierto se vendieron en menos de media hora) sonó en primer lugar la monumental obra de Berlioz para a continuación interpretarse Aita Gurea, de Francisco Madina, y Gernika de Pablo Sorozábal, que contó con el acompañamiento de una treintena de txistularis y que emocionó especialmente al público, que aplaudió calurosamente cada una de las obras, con un total de once minutos de ovación que fue gratificada con la interpretación de Agur Jaunak por todos los intérpretes.

El director Victor Pablo Pérez se mostraba muy satisfecho tras el mismo, tras el cual concluía como única pega que “sería estupendo poder interpretarla en un segundo concierto”.

DOS ORFEONES EN EL ESCENARIO

El Orfeón Pamplonés no actuaba en el festival donostiarra desde el año 2009, cuando participaba en la inauguración para presentar el espectáculo que giró hasta 2014 con Carmina Burana, de Orff, con impactante puesta en escena de la Fura dels Baus.

El encuentro sobre el escenario de los dos orfeones, Pamplonés y Donostiarra, no se producía desde 2004, cuando ambas formaciones participaron en la Condenación de Fausto, de Berlioz, en el festival alemán del Rhur. En 1970, ambos estrenaron juntos en España la Octava Sinfonía de Mahler bajo la dirección de Rafael Frühbeck de Burgos, director honorífico del Orfeón.

El Orfeón Pamplonés cierra con este concierto una temporada en la que ha estado en el Auditorio Nacional de Madrid interpretando Alexander Nevsky, de Prokofiev, junto a la orquesta Filarmónica de San Petersburgo y Yuri Temirkánov, en Andorra junto a la orquesta de Cadaqués y Gianandrea Noseda interpretando el Réquiem de Mozart, o en Palma de Mallorca junto a la orquesta de las Islas Baleares, donde interpretó bajo la dirección de Pablo Mielgo la Segunda Sinfonía de Mahler.

El encargado de poner orden en este gigantesco "rompecabezas" -en su propia expresión- es Víctor Pablo Pérez, director de la Orquesta y Coro de la Comunidad de Madrid (ORCAM) y habitual de la Quincena, quien comulgó desde el principio con la idea de Patrick Alfaya de cerrar el festival con un programa de exaltación de lo vocal.

Para Alfaya, se trataba de celebrar la Capitalidad Europea de la Cultura por parte de San Sebastián con aquello que, musicalmente, mejor caracteriza al País Vasco; Víctor Pablo Pérez coincidía en que la "fuerza musical" de Euskadi y Navarra está quintaesenciada en la excelencia en el terreno coral del Orfeón Donostiarra y del Orfeón Pamplonés, ambas instituciones centenarias y muy solicitadas dentro y fuera de nuestras fronteras.


  • Los comentarios que falten el respeto y que no se ciñan al tema de la noticia, podrán ser eliminados.
  • Cada usuario será el único responsable de sus comentarios.
El Orfeón Pamplonés emociona en el cierre de la Quincena Musical Donostiarra