Correr el encierro de San Fermín es un sueño a cumplir para muchas personas. La tradición de correr junto a una manada de toros en San Fermín se ha vuelto tan popular que muchos extranjeros mencionan San Fermín o el encierro al oír la palabra España.
Desde la costa oeste de los Estados Unidos, Joe y Alex han aterrizado en la península para venir a correr el encierro junto al resto de temerarios. "Nosotros esperábamos que el encierro fuera una locura y lo ha sido. Me imaginaba que iba a ser más arriesgado y menos seguro, pero al final no ha sido para tanto. Eso sí, hemos visto a mucha gente tirada en el suelo", admiten los californianos.
Durante el encierro, los dos han sentido un subidón de adrenalina y emoción que los ha dejado sin palabras. "Estar al lado de los toros es brutal porque puedes tocarlo. Es un bicho enorme cuando lo ves de cerca, y sorprende que puedes incluso sentir el latido de su corazón", explica Alex.
"Nos pusimos a lado de los toros, pero Joe quiso ponerse enfrente y correr a toda velocidad. El problema fue que con toda la gente que había le acabaron empujando al lateral y no le quedó otra que quedarse al lado del toro. Tampoco nos tropezamos ni nada, así que fuimos bastante afortunados", añade Alex.
Tras correr junto a los toros han entrado dentro de la plaza donde han seguido disfrutando con el ganado. "Logramos entrar al ruedo y es impresionante llegar y que puedas seguir corriendo con las vaquillas. Las esquivas y te quedas cerca de ellas para ver cómo se comportan con gente alrededor", comenta Joe.
Sorprendentemente, los dos jóvenes no se han quedado en Pamplona a dormir, sino que han llegado a la madrugada del 12 de julio. "Llevamos a penas unas horas aquí. Hemos venido exclusivamente a correr y a la tarde nos vamos derechos a Barcelona para pillar un avión a casa", aseguran.
Según los dos amigos, el ambiente que generan las fiestas de San Fermín "es increíble. De lejos el mejor lugar de mundo. Para nosotros esto es como Disneyland en Estados Unidos. Mientras unos dicen que van a Disneyland, nosotros decimos que vamos a Pamplona", compara el dúo.
Ahora que han vivido una pequeña parte de lo que es San Fermín, se lamentan por no quedarse más tiempo en la capital navarra: "El año que viene volvemos segurísimo. Correremos otra vez y sin duda vendremos más días".
