Los tres astados pertenecían a ganaderías navarras y fueron lidiados en las corridas de San Fermín.
7 DE JULIO DE 1858: 'CHOCOLATERO'
Toro tostado, oscuro de capa, sexto de la tarde y perteneciente a la ganadería Zalduendo (Caparroso). Ese día muleteaban en el coso pamplonés Francisco Arjona, Cúchares, y Julián Casas 'El Salamanquino'. A este último le tocó lidiarlo. El morlaco, que entraba directo al bulto, mató a diez caballos, hirió de gravedad a otro y aceptó 22 varas. El público pidió su vida cuando lo iban a banderillear y los cabestros salieron a por él. Terminada la corrida, se le hizo la cura correspondiente y volvió a Caparroso.
9 DE JULIO DE 1861
No se sabe su nombre y pertenecía a Miguel Poyales, el empresario de la plaza de toros. Fue el sexto toro de la corrida de la tarde y los toreros fueron Francisco Arjona y José Carmona 'El Panadero', que estuvo acompañado de su hermano Manuel. Estos realizaron la faena. Se supone que el astado efectuó una gran pelea en varas, con codicia, y que aguantó puyazos sin volver la cara. Abandonó el ruedo altivo.
9 DE JULIO DE 1869: 'LANCERO'
Saltó al ruedo el quinto; era bragado, corniabierto y retino oscuro, de la ganadería Zalduendo. Mostró bravura, voluntad y un gran poder en varas. Esa tarde lidiaban en la plaza Antonio Carmona 'El Gordito' y Rafael Molina 'Lagartijo'. Cuando iban a clavarle las banderillas, el público pidió el indulto. El astado finalmente tuvo que ser sacrificado debido a las graves heridas que le había ocasionado el toreo.
