Ha reabierto, tras unos días de descanso, el 5 de julio, justo a tiempo para las fiestas de San Fermín, tras cerrar unos días el pasado 22 de junio. El regreso de este restaurante con hotel, situado en plena naturaleza, se ha convertido en una excelente noticia para los amantes de la buena cocina navarra.
El establecimiento se encuentra a apenas 29 kilómetros de Pamplona, en dirección a Francia por la carretera N-121-A, justo al inicio del puerto de Belate, en una zona que muchos describen como idílica. Enclavado en pleno valle, el lugar combina el encanto del paisaje con el sabor auténtico de una cocina que ha sabido mantener la esencia de la tradición.
No hace falta buscar excusas para acercarse: una comida formal, un rato relajado en la terraza o simplemente un buen postre ya son motivo suficiente. Especialmente si ese postre son los canutillos rellenos de crema pastelera, la auténtica estrella de la casa.
Crujientes por fuera, suaves y dulces por dentro, han conquistado a generaciones de comensales. También la cuajada quemada, otro de los clásicos de la carta, ha mantenido intacto su estatus de favorito.
El restaurante del Hotel Venta de Ulzama se ha consolidado con el tiempo como una de las grandes referencias de la gastronomía local. Ofrece una cocina basada en productos frescos de temporada, con platos de caza, carnes y pescados de gran calidad.
Destacan las verduras cultivadas en su propia huerta, como el espárrago, la alcachofa o el cardo, así como ingredientes muy valorados como los hongos-beltza y los perretxikos, que dan forma a recetas que respetan la tradición pero aportan autenticidad y sabor.
La experiencia se completa con un servicio de comedor amplio y acogedor, en un entorno natural que invita a quedarse. El hotel, que cuenta con habitaciones abuhardilladas, ofrece wifi gratuito, televisión y aparcamiento exclusivo para sus clientes, además de desayuno, comidas y cenas.
El lugar ha llamado la atención incluso de personajes públicos. Hace unos meses, el periodista Carlos Herrera ha visitado el valle y el establecimiento. “Tras Castilla y Rioja me he venido a caminar por el Baztán, paraíso navarro. Y entre los bosques me he encontrado estos simpáticos habitantes. Os aconsejo esta soberbia casa, Venta Ultzama, en el Alto de Belate. Espectacular trato, sabor, ambiente. Una excelencia que conocer”, ha publicado en su cuenta de Instagram.
No se trata solo de gastronomía o paisaje. La historia también pesa: Venta de Ulzama lleva más de 100 años en funcionamiento. Gestionada por la cuarta generación de la familia Díez de Ulzurrun Goñi —los hermanos Alberto, Óscar, Pachi y José Ignacio—, ya ha empezado a incorporar a la quinta generación.
Forma parte del Grupo Castillo de Gorraiz y en 2021 recibió el Premio Empresa Familiar de Navarra, otorgado por ADEFAN (Asociación para el Desarrollo de la Empresa Familiar Navarra), en reconocimiento a su trayectoria en el sector de la hostelería y la restauración.