Unos 300 camiones han participado este martes en una caravana convocada en Pamplona por el sindicato Hiru para hacerse eco de las reivindicaciones del sector del transporte, que, según ha indicado Alberto Núñez, técnico de Hiru, está viviendo una situación "crítica" e "insostenible".
La caravana ha partido desde las instalaciones de Bideko Aterpe, en Galar, y ha recorrido distintas calles de la capital navarra. Núñez ha explicado que el sector está en una situación "crítica" debido al aumento del precio del gasoil, "que durante el año 2021 subió un 26,5 por ciento y la semana pasada vimos cómo repuntaba medio euro por encima del precio que ya tenía".
Según ha explicado, "la subida lo que consigue es que nosotros dejemos de trabajar, la actividad no es sostenible si los costes son superiores a lo que se cobra". "El problema del sector es la falta de capacidad de repercutir cualquier subida de coste ya sea subida de gasoil, peajes...; cualquier coste que nos saque del mercado, nos deja fuera y la actividad no es sostenible", ha comentado.
Alberto Núñez ha señalado que "cualquier medida que suponga un descenso en el precio de gasoil bienvenida sea". "Hay que ver cómo quedan los impuestos al gasoil, que tiene el impuesto de hidrocarburos, el IVA y creo que alcanza el 50 por ciento del precio", ha expuesto.
Ha criticado "el abandono de la Administración" y ha señalado que "este sector necesita una regulación para que no se produzcan situaciones de que los costes sean superiores".
En el caso de Navarra, ha indicado que "llevamos años en los que la Administración ha apretado las tuercas al sector". "Cambió la fiscalidad, cambió los modos de tributación, está pensando en poner peajes en vías de doble sentido...", ha censurado, para reclamar una regulación del sector, "una implicación de la Administración, que sea consciente de que este sector necesita de su apoyo".
Ha recordado que se trata de un sector compuesto en su mayoría por transportistas autónomos, por pequeñas empresas, "hablamos de un 85 por ciento con ese tamaño". "Y esta gente que mueve la actividad necesita de un respaldo porque la capacidad de negociación es muy pequeña. Si no hay respaldo de la Administración ocurren situaciones de este tipo, sube el gasoil y no tenemos margen de maniobra", ha manifestado.
El representante de Hiru ha señalado que "hay empresas que, ante estas subidas, están reaccionando y que están aplicando subidas pero en muchos casos esas subidas son insuficientes porque hablamos de que en una semana ha subido medio euro el precio del litro de gasoil". "Esas subidas en muchos casos no llegan a cubrir el coste", ha insistido.
Por su parte, el Real Automóvil Club Vasco Navarro (RACVN) ha pedido este martes al Gobierno que baje temporalmente los impuestos a los carburantes, al igual que hizo en su momento con la luz.
En una nota, dicha organización ha propuesto que se reduzcan "con carácter urgente" los impuestos aplicados a la gasolina y el diésel hasta que el precio de los carburantes y del barril de Brent vuelvan a estabilizarse.
Reclama, en concreto, que se reduzcan hasta que el barril de Brent vuelva a estar por debajo de 80 dólares/barril. Según ha puesto de manifiesto, a cierre del 14 de marzo su precio se sitúa en 106,4 y el 28 de febrero registró un valor máximo de 139,13.
El club automovilista, que ha indicado que cerca de la mitad del precio final del combustible "son impuestos", ha señalado que el Gobierno "tiene margen para reducir la carga fiscal" temporalmente sin que le descuadren las cuentas ya que con la subida de los precios "recauda más ahora".
Según ha advertido, "si no se actúa pronto, la cesta de la compra se encarecerá aún más. Repercutirá en todo tipo de productos, desde el elemental hasta el de lujo, e incluso puede producirse una rotura en la cadena de suministro (que los transportistas no puedan realizar su actividad y comiencen a escasear productos)".
