Jonás Esquíroz Gil ha ganado el concurso internacional de Supertmatik, celebrado en mayo, en el que han participado alumnos de más de 45 países.
Con solo 12 años, el navarro Jonás Esquíroz Gil es campeón mundial de cálculo mental. Este estudiante del colegio El Redín está entre los 257.250 alumnos de los más de 45 países que han participado en la decimotercera edición de Supertmatik. La competición ha sido organizada e impulsada por Eudactica y está dirigida a niños de entre 6 y 16 años.
La semana pasada, Jonás se enteró de la buena noticia cuando un profesor le sacó de clase para comunicarle este logro. Cuando su madre, Nagore Gil, recibió una llamada del colegio, se llevó un pequeño susto. Desde el centro decidieron bromear con la situación y le dijeron que su hijo se había metido en un lío. Gil confiesa que, al principio, intuyó que su hijo había sufrido un accidente. Pero en cuanto Jonás habló al otro lado de la línea para decir lo que realmente había pasado, la alarma se desvaneció. "Ya te contaré más en la cena, mamá", le dijo el campeón mundial de Supertmatik. Y colgó.
"Se trata de un alumno con una capacidad innata para el cálculo y la retención", explica la madre. Desde pequeñito ya disponía de este talento que recientemente le ha llevado a lo más alto.
45 segundos y 93 centésimas es el tiempo récord con el que Jonás destacó entre los 38.150 participantes de su categoría. El reto cuenta con una baraja de cartas en las que se proponen hasta diez operaciones distribuidas según los niveles de dificultad.
Durante el mes de mayo, se celebraron las tres fases con las que cuenta el concurso internacional. Estas comienzan con la participación de todos los alumnos pertenecientes al mismo curso y desembocan en la fase final internacional, vía online, en la que concursan dos alumnos clasificados por cada curso en representación de su propio centro educativo.
La madre de Jonás ha sido testigo de lo mucho que ha disfrutado el estudiante, en cada una de estas etapas: "Es un ejercicio que no está solo enfocado en el resultado exitoso, Jonás también ha disfrutado del camino". Gil añade además que el proceso competitivo ha sido como un juego para él.
Los padres del estudiante, Eduardo Esquíroz y Nagore Gil, destacan la sencillez con la que ha asumido su victoria. El alumno ha aprovechado este éxito para compartirlo con su familia y compañeros de clase. El alto nivel de sus competidores es lo que le ha motivado a seguir adelante en todo momento.
A pesar de su habilidad natural, Jonás, segundo de cinco hermanos, asegura que de momento no enfoca su futuro en las matemáticas. El estudiante de 6º de Primaria baraja algunas posibilidades a las que le gustaría dedicarse algún día y que nada tienen que ver con esta disciplina, como el fútbol o el periodismo.
La naturalidad con la que Jonás ha asumido y celebrado esta victoria es una recompensa al esfuerzo y el trabajo invertidos. De momento, continúa compartiendo esta experiencia con su entorno más cercano.
