Del 26 de abril al 3 de agosto, los valles de Baztan y Malerreka volverán a ser escenario de uno de los espectáculos deportivos más singulares y arraigados de Navarra: el XLV Campeonato Navarro de Laxoa.
Siete equipos disputarán esta edición de un torneo que no solo mantiene viva una tradición con siglos de historia, sino que también representa una de las expresiones culturales más genuinas del norte navarro.
Pese a ser uno de los deportes más antiguos de la pelota vasca, la Laxoa sigue siendo una gran desconocida para muchos. También conocida como Guante, esta modalidad tradicional ha resistido al paso del tiempo gracias al esfuerzo de pueblos como Doneztebe, Oitz, Saldias o Irurita, que cada verano celebran partidos en sus plazas y frontones, ofreciendo un espectáculo único tanto para vecinos como para visitantes.
La historia de la Laxoa se remonta a los siglos XVIII y XIX, cuando las crónicas la describían como el “deporte rey” en el Viejo Reino de Navarra.
Fue tan popular que los pastores lo practicaban en los soropiles, campos segados en los montes. Su carácter comunitario y festivo lo convirtió en una cita imprescindible hasta que, entrado el siglo XX, cayó en desuso. No fue hasta finales de los años 70 cuando se recuperó de forma estable con un campeonato en Baztan-Erreka, semilla del actual campeonato navarro.
Hoy, este deporte se juega en un campo rectangular de hasta 70 metros de largo, con una pared de rebote al fondo. Cada equipo está formado por cuatro jugadores —Sacador, Número y dos Cuartos— que golpean la pelota de cuero con un guante especial, diferente según su posición. El saque se realiza desde el botillo, un atril que puede ser de piedra, madera o cemento. Durante el encuentro, el rayador o txatxari marca los tantos en voz alta y mantiene el ritmo del juego.
Además del aspecto técnico, asistir a un partido de Laxoa permite revivir una parte de la historia y de la identidad de los pueblos navarros. La entrada a todos los encuentros es gratuita, y el ambiente festivo, especialmente durante los meses de junio y julio, convierte a este deporte en una celebración del patrimonio local.
El campeonato se desarrolla en formato liguilla round-robin, con todos los equipos enfrentándose entre sí a lo largo de siete jornadas que se celebran entre finales de abril y mediados de junio. Tras un par de fines de semana reservados para jornadas de recuperación, comenzarán las eliminatorias.
Según el reglamento:
Los equipos que terminen primeros y segundos en la liguilla pasarán directamente a semifinales.
Los clasificados entre el tercer y sexto puesto jugarán los cuartos de final, a partido único.
El equipo que quede en séptimo lugar quedará automáticamente eliminado.
En los cuartos de final, el tercer clasificado se enfrentará al sexto, y el cuarto al quinto, siempre jugando en casa del equipo con mejor clasificación. Los ganadores se medirán en semifinales a los dos mejores de la liguilla, que podrán elegir si quieren jugar la ida o la vuelta como locales.
Las fechas claves del campeonato son:
Cuartos de final: 28-29 de junio y 5-6 de julio
Semifinales: 12-13 y 19-20 de julio
Final: 2-3 de agosto en Doneztebe, con el partido por el tercer puesto por la mañana y la gran final por la tarde.
