El 56 % de los navarros no está satisfecho con la atención telefónica que le ofrecen las empresas cuando tiene alguna queja o duda que transmitir, según muestra una encuesta encargada por la Asociación de Consumidores de Navarra Irache.
El 24 % considera que no le solucionan el problema; el 18 %, que le alargan la llamada; el 9 % no se siente escuchado; y el 6 % se queja porque no le contestan cuando llama, señala Irache en un comunicado.
La asociación considera necesario que las empresas mejoren notablemente su atención postventa y den un trato adecuado al consumidor cuando éste quiere comunicar alguna queja o resolver alguna duda sobre el producto o servicio adquirido. También reclama que haya un mayor control administrativo sobre la calidad de estos servicios.
Irache destaca que un gran número de las personas que acuden a la asociación ya muestra malestar, más allá del problema que hayan podido tener, por el trato inadecuado que han recibido por parte de la empresa al intentar comunicarlo o resolverlo por teléfono.
Este déficit se da, en una u otra medida, en buena parte de los campos de consumo, si bien es especialmente habitual en algunos sectores como la telefonía, la luz y el gas o el transporte aéreo.
Es muy habitual recibir a personas que se han cambiado de compañía telefónica y han descubierto que la anterior les ha cobrado permanencias de 200 euros. Al llamar, "le ponen continuas dificultades porque ya no es cliente de la operadora", indica la asociación.
OBSTÁCULOS
Los clientes de empresas telefónicas también encuentran muchos obstáculos para darse de baja por teléfono.
Muchos consumidores también llaman a sus suministradoras de luz o gas para entender sus contratos, por qué la factura cambia de mes a mes o porque tras el primer año los recibos han subido de forma general, pero, afirma Irache, "en muy rara ocasión el consumidor consigue entender mejor a través de estas llamadas por qué paga lo que paga en su recibo de luz o gas".
En el campo de los seguros, según Irache, se suele repetir el caso de un cliente que quiere cambiar de compañía y llama por teléfono para comunicar a su actual aseguradora que se quiere dar de baja.
En la aseguradora no le ponen ningún problema, pero, cuando ya ha cambiado de compañía, ve que también le está cobrando prima la anterior. Cuando llama, le indican que no consta ninguna solicitud de baja.
Irache afirma que otro caso de una atención "insuficiente" se ha dado este año con las compañías aéreas, con las que fue difícil contactar durante el estado de alarma para recibir información sobre los vuelos cancelados.
"Si bien en un primer momento la situación pudo ser inabordable, el problema es que meses después, cuando el consumidor trata de contactar con ellos telefónicamente, siguen sin darle una respuesta satisfactoria sobre la devolución del billete del vuelo cancelado", resalta la asociación.
Irache también menciona los problemas que han tenido muchos clientes al tratar de ponerse en contacto con la empresa Dentix, que entró en concurso de acreedores.