En algunos pueblos, basta con encender un ordenador para notar el cambio. Allí donde hace pocos años era difícil ver una barra de conexión, hoy se montan negocios digitales, se celebran videollamadas sin cortes y se trabaja desde casa con normalidad. La llegada de la fibra óptica ha supuesto una auténtica revolución silenciosa en muchas pequeñas localidades de Navarra, donde esta conexión ultrarrápida es ya tan importante como el agua corriente o el servicio médico.
La tecnología ha dejado de ser un lujo urbano. Gracias a la fibra, muchas familias pueden quedarse a vivir en sus pueblos sin renunciar a un empleo cualificado, a la educación online o a la digitalización de sus negocios. También la Administración gana eficiencia cuando hay una buena conexión. Y todo ello tiene un impacto directo: la población no solo se mantiene, sino que crece.
Un ejemplo claro está en la Ribera navarra. En una de sus localidades, la población ha aumentado un 10% desde el año 2019, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). ¿El punto de inflexión? La llegada de la fibra óptica, desplegada ese mismo año por la operadora Adamo, que fue la primera en apostar por esta zona. Desde entonces, vivir y trabajar allí ha sido mucho más fácil.
Se trata de Corella, que cuenta hoy con 8.712 habitantes, consolidándose como el segundo municipio más poblado de la Ribera, solo por detrás de Tudela. Aunque el crecimiento demográfico responde a varios factores, las cifras reflejan que disponer de buena conectividad ha sido clave para frenar la despoblación y dar nuevas oportunidades a la zona.
Adamo ha tenido un papel destacado en este proceso. Además de ser pionera en llevar la fibra a Corella, la compañía ha conectado a más de 120.000 hogares en Navarra desde 2017, priorizando zonas rurales y municipios con peor cobertura. En total, 200 de los 272 ayuntamientos navarros han estrenado red de fibra o han ampliado la existente en estos años.
La apuesta de Adamo por Corella se ha reforzado este año con la apertura de su primera tienda propia en Navarra, precisamente en este municipio. El nuevo local, situado en el número 5 de la plaza de los Fueros, abre de lunes a viernes en horario de mañana y tarde (de 10:00 a 14:00 y de 16:30 a 20:00), y ofrece una atención personalizada.
La tienda no solo sirve para contratar servicios. Los vecinos pueden resolver dudas técnicas, modificar contratos, duplicar o bloquear tarjetas SIM, solicitar PIN o PUK, entregar o recoger equipos y acceder a todo tipo de gestiones con el personal de Adamo cara a cara. Un servicio que, en lugar de alejarse de los pueblos, se acerca a ellos.
El caso de Corella demuestra que la conectividad es mucho más que una cuestión técnica. Es una herramienta para construir futuro. Porque cuando hay fibra, hay vida.
