SOCIEDAD
El pueblo de Navarra que le planta cara a Correos para recuperar un edificio cedido hace 70 años
El edifcio se encuentra en estado de ruina y vandalizado. A pesar de todo, han iniciado los trámites para revertirlo al patrimonio municipal.

El Ayuntamiento de Corella ha decidido dar un paso firme y plantar cara a Correos para recuperar el antiguo edificio ubicado en la calle Laurel número 2, un inmueble que permanece abandonado desde hace dos décadas y que fue cedido gratuitamente en 1954 por el propio consistorio para la construcción de una oficina postal.
En un movimiento sin precedentes, los cuatro grupos municipales han acordado por unanimidad iniciar el proceso de reversión del terreno al patrimonio municipal, tal y como recoge el documento original firmado hace 70 años, en el que se advierte que si el edificio se destina a un uso diferente al postal, “la cesión será nula”.
Pese al estado actual del inmueble, vandalizado en todas sus plantas y con un bajo nivel de conservación, según ha reconocido una tasación oficial, Correos exige más de 400.000 euros por su venta. La empresa pública SEGIPSA ha valorado el edificio en 421.000 euros, basándose en criterios residenciales. Sin embargo, una nueva tasación independiente encargada por el Ayuntamiento a Savills Valoraciones y Tasaciones SAU ha cifrado el valor real en apenas 100.308 euros.
El conflicto lleva arrastrándose desde la legislatura pasada. En un primer intento de compra, Correos propuso un precio de 447.000 euros, muy alejado de los 244.000 euros que estimaba el estudio encargado por el Ayuntamiento. En una segunda negociación, se planteó un alquiler con opción a compra, pero la propuesta se vino abajo tras el cambio de presidencia en la empresa tras las elecciones generales de 2023, cuando Pedro Saura relevó a Juan Manuel Serrano al frente de la entidad.
Con el nuevo presidente, se descartó el alquiler y se volvió a apostar por la venta, aunque el valor fijado volvió a situarse muy por encima de lo que Corella considera justo. Además, en el informe de SEGIPSA se admite que el edificio presenta un estado general muy deficiente, aunque se valoró como si estuviera en condiciones de uso residencial.
La clave de la estrategia municipal está en el acuerdo original de 1954, donde se estipula que el terreno fue cedido de manera gratuita y exclusiva para uso postal. “Si se destinaren a otro fin, la cesión será nula y los terrenos revertirán al patrimonio municipal”, recoge el documento legal en el que ahora se apoya el Ayuntamiento para reclamar lo que considera suyo.
Mientras se estudia la posible compra del edificio, el Ayuntamiento ha dejado claro que defenderá los intereses de la ciudad frente a lo que consideran un intento injusto de sacar beneficio de un bien público cedido para un fin muy concreto y ya incumplido.