• miércoles, 24 de abril de 2024
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SOCIEDAD

Un sindicato alerta de las importantes brechas de género existentes en Navarra

El 27,1 % de las mujeres trabaja a jornada parcial mientras que el porcentaje se reduce al 6,2 % en el caso de los hombres.

Dos mujeres trabajando con un ordenador. ARCHIVO
Dos mujeres trabajando con un ordenador. ARCHIVO

El sindicato CCOO ha alertado este jueves de las importantes brechas de género existentes en el mercado de trabajo en Navarra y ha subrayado que las mujeres tienen una tasa de actividad 8 puntos menor que la de los hombres, mientras que su temporalidad es del 28 %, por un 21 % de la población masculina.

Según ha explicado en conferencia de prensa la responsable de Mujer e Igualdad del sindicato, Eva Mir, la situación laboral de loas mujeres en Navarra es “extraordinariamente precaria” y en este sentido ha afirmado que “los datos son contundentes”.

Así, ha apuntado que la jornada parcial afecta de lleno a las mujeres, que firman 8 de cada 10 contratos parciales. Además, el 27,1 % de las mujeres trabaja a jornada parcial mientras que el porcentaje se reduce al 6,2 % en el caso de los hombres.

El informe “Análisis gráfico de la situación de la mujer en el mercado de trabajo”, presentado por Mir, revela igualmente que en Navarra, de las 46.600 personas que trabajan a jornada parcial, 37.300 son mujeres.

Todo ello, según se resalta en el informe, provoca que las mujeres cobren 6.836 euros menos. De media, el salario de un hombre es de 30.565 euros, mientras que el de una mujer es de 23.729, es decir, que el salario de una mujer tendría que crecer un 28 % para equipararse al de un hombre.

Los complementos salariales explican casi la mitad de la brecha salarial. Casi el 40 % de la brecha mensual en la nómina entre mujeres y hombres se concentra en los mismos, que en algunos casos son otorgados con criterios discrecionales, sobre todo en los puestos directivos, y que benefician menos a las mujeres.

En otros casos retribuyen aspectos “masculinizados” del trabajo, como el esfuerzo físico, la penosidad, la nocturnidad o la disponibilidad horaria, mientras que no se pagan otros aspectos “feminizados” del trabajo como la atención, precisión o resistencia.

El sindicato también analiza en el informe la segregación ocupacional y en este sentido señala que 113.500 mujeres trabajan en el sector servicios, donde están los salarios más bajos, y solo 20.700 en la industria. El 82 % de las mujeres están ocupadas en el sector servicios, el 15 % en la industria, el 2,8 % en la agricultura y el 0,8 % en la construcción.

Por tanto, ha dicho Mir, se da una “subrepresentación” de la mujer en el sector industrial que en general tiene mejores condiciones y mejores salarios, lo que dificulta la lucha contra la brecha de género en salarios.

Para abordar esta gran desigualdad en el mundo laboral, ha comentado Mir, el sindicato exige a la Inspección de Trabajo mayor control sobre el cumplimiento de los planes de igualdad y, al empresariado navarro, un mayor compromiso para activar los planes de igualdad en todas las empresas que por ley deben contar con ellos.

Mir ha recordado que a partir del próximo 7 de marzo las 443 empresas navarras de más de 50 trabajadores y trabajadoras deberán haber aprobado un plan de igualdad. Desde el año 2021 y en lo que se lleva de 2022, ya han entrado en vigor 80 planes de igualdad.

La sindicalista ha apuntado que el porcentaje de empresas que ya han registrado planes de igualdad es pequeño, pero en 2021 y 2022 ha existido un “fuerte impulso” para el cumplimiento de la normativa.

CCOO también reclama la adopción de diferentes regulaciones que garanticen la igualdad de trato y de oportunidades en el acceso al empleo, en la formación y en la promoción profesional, y en las condiciones de trabajo en las empresas de Navarra, así como el desarrollo de políticas activas de empleo para mujeres desempleadas con itinerarios personalizados en orientación, formación y recualificación profesional.

El secretario general de CCOO en Navarra, Chechu Rodríguez, ha asegurado al respecto que “la situación laboral que padecen las mujeres” en Navarra “se basa en la desigualdad”.

Rodríguez ha reconocido que la reforma laboral “no logrará el milagro de convertir empleo precario en empleo decente de la noche a la mañana”, pero será a su juicio un “punto de inflexión” para avanzar en esa dirección


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